Una casa contemporánea y rural a la vez

En días en los que la búsqueda de lo auténtico empieza a convertirse en la aspiración de muchos, y el entorno natural le gana terreno a la urbe en lo sueños del futuro propietario, encontramos cada vez más ejemplos de casas de campo, como este magnífico retiro en Córcega. Combinando materiales y técnicas tradicionales, con estilo y acabados contemporáneos, el estudio de arquitectura WY-TO nos invita a esta maravillosa pieza monolítica integrada en un paisaje de pinos y piedra para escapar del calor estival.
- Integrada en el entorno natural
- Soluciones tradicionales
- Una ventana al campo
- Interior austero y perfeccionista
- Amplitud y aprovechamiento
- Reinventar la cocina de campo
- Tonos piedra y envolvente total
- La belleza del detalle
Integrada en el entorno natural

El proyecto se sitúa en un solar en pendiente, con espesa vegetación. Para acomodar los 113 m de la casa, fue necesario intervenir en el terreno para crear dos terrazas artificiales, y de esta forma, organizar la distribución en una primera cota de acceso, y otra inferior, siguiendo la pendiente. El volúmen principal se coloca así sobre una superficie plana, y su perfil se recorta en el paisaje como un dibujo. Los muros de piedra típica de la zona y la sencillez de sus líneas, integra la vivienda en el entorno natural convirtiéndola en un elemento vernáculo.
Soluciones tradicionales

Como es natural en una casa de campo, se busca proteger el interior de los cambios bruscos de temperatura, y para ello, el muro de piedra es una solución excelente, por la alta inercia térmica del material. Además los marcos de madera de las ventanas, recortados en la piedra con cuidada precisión, ofrecen también una amortiguación térmica natural, sin necesidad de recurrir a soluciones combinadas de pvc y aislante. Por otro lado, es imprescindible en este entorno silvestre disponer de un amplio espacio exterior protegido del sol con la ayuda de la sombra de los árboles y otros recursos ligeros como la tradicional cubierta de caña. Este espacio intermedio, continuación del interior de la vivienda y preámbulo del cielo abierto se convierte en el centro de la casa, durante as largas tardes de verano.
Una ventana al campo

En semejante marco natural es esencial que sea posible admirar las vistas también desde el interior. Por eso, un amplio ventanal corredero y abatible recibe al visitante enmarcando la vegetación a la altura de las copas de los árboles, acercando el verde hacia las estancias. La cubierta exterior de caña ofrece una luz tamizada que difumina el límite entre dentro y fuera y protege de la radiación directa en el interior. La brisa del monte cruza la vivienda de lado a lado y casi podemos sentir el frescor de la estancia a través de la foto.
Interior austero y perfeccionista

Una vez en el interior se produce el cambio de una estética rural y campestre, a un ambiente elegante y pulcro, de líneas austeras y tonos suaves en escala de grises. De un golpe de vista pueden distinguirse los contados materiales empleados en el interior, haciendo de su combinación un conjunto sobrio impecable. El suelo es de microcemento oscuro, fundiéndose con el mobiliario, y las vigas y perfiles de madera con tratamiento de barniz rojizo destacan sobre el fondo blanco de paredes y techo.
- Pavimento continuo con un resultado uniforme y muy resistente. Requiere de profesionales especializados.
- Se puede colocar sobre antiguos pavimentos sin tener que retirar el anterior.
- Requiere mantenimiento con productos específicos para mantener el color.
Amplitud y aprovechamiento


Parte interior se estructura en dos niveles en altura, ofreciendo un espacio extra bajo la cubierta inclinada, a modo de altillo con carácter polivalente, pudiéndose convertir en un dormitorio extra, o espacio de descanso. Limitando el color para las piezas de madera, el resto de elementos se presentan lacados en blanco, y la imagen global nos recuerda a una versión modernizada de un antiguo almacén de trigo. Un interior de inspiración tradicional y acabados contemporáneos.
Reinventar la cocina de campo

La cocina, abierta al espacio principal, nos muestra una paleta neutra de tonos blancos y metalizados, convirtiéndose en un espacio aséptico con notas más urbanas que campestres. Las encimeras se resuelven con un tablero de madera con tratamiento antihumedad, y la pared cercana a los fuegos y grifería se cubre con una plancha de acero inoxidable, de alta resistencia y fácil mantenimiento, que además aporta profundidad al conjunto. Los electrodomésticos se integran en el perímetro y nada parece perturbar el ritmo de la estética general.
- Cada actividad (cocinar, almacenaje,…) debe tener su propio espacio.
- Recordar los enchufes a la hora del planificar la reforma.
- Pedir incluir en el presupuesto final la limpieza, licencias y contenedores de escombros.
Tonos piedra y envolvente total

El baño escapa hacia tonos piedra, revistiendo las paredes y suelo con el mismo alicatado, creando así un interior uniforme. El mueble de obra se diseña para incluir el lavabo, y se cubre con una capa de resina. Se añaden baldas de madera, ofreciendo espacio de almacenaje en sintonía con la envolvente.
El interior de la ducha continúa con el mismo alicatado del suelo, acentuando la pendiente hacia el sumidero para conducir el agua.
La belleza del detalle

La perfección y claridad de los detalles constructivos se convierte en uno de los mayores logros de la casa. Las vigas de madera de la cubierta inclinada se sustituyen puntualmente por vigas de acero atornilladas, a las que se suelda una ligera estructura metálica para sujetar la malla que delimita el recinto del altillo. Todo esto puede ser deducido fácilmente por la sinceridad con la que se presentan los materiales y soluciones constructivas. Nada que esconder en una casa de resultados impecables.
4 Comentarios
Que pasada de fachada. Me ha gustado mucho la piedra de fuera. Por dentro de lo más elegante.
Ya tengo casa para comprar si me toca la lotería. Que bonita <3
Me gusta muchísimo esta casa. Es austera pero con toques súper especiales y lo que se ha hecho con la madera es realmente genial
Pues no. De podía haber utilizado el desnivel para una escalera y tener asceso al altillo y no poner una escalera de cuadra en un lugal q mas parefe un museo moderno que una casa de campo. Eso sí, el gran ventana-puerta para tener a mano las copas de los árboles. Pero horroroso poner una reja de obra sea para lo que sea el motivo.