¡Cambia las paredes de tu cocina de forma rápida, limpia y sin obras!

Muchas cocinas tienen azulejos anticuados, con un diseño desafortunado (por llamarlo de alguna manera) o simplemente sosos… Para estos casos, los azulejos vinílicos son una excelente opción, ya que te permiten reavivar las paredes de la cocina sin esfuerzos y sin hacer ningún tipo de obra; solo tienes que despegar el papel del adhesivo y pegarlo en la pared.

Puedes optar por dibujar solo una cenefa, o bien, cubrir la pared entera. Si vives de alquiler, es la mejor forma de cambiar la cocina sin tener que pedirle permiso al propietario/a, ya que los azulejos vinílicos se retiran sin dañar la pared.

Seguramente has visto muchas imágenes de cocinas con papel pintado en las paredes. Pero aún así, te sigue generando dudas: ¿y si se mancha? ¿aguantará la humedad? Pues bien, debes saber que existen distintos tipos de papel pintado y los que se aplican en cocinas y baños son los papeles pintados vinílicos o los papeles pintados tejidos no tejidos (TNT), ya que resisten la humedad y se pueden limpiar superficialmente con un trapo húmedo. Escoge un estampado que te guste ¡y anímate a probarlo!

La madera es, probablemente, el material que más calidez transmite, pongas donde la pongas. Su naturalidad, textura y color crean una atmósfera que invita a bajar revoluciones, a relajarse. Así que, si te consideras todo un/a masterchef, disfrutas cocinando y quieres renovar las paredes de tu laboratorio gastronómico, ¡prueba con la madera! Puedes optar por listones nuevos o hacerlo tú mismo/a aprovechando los listones de madera de los palés reciclados.

Los frisos rastrelados son una magnifica opción para introducir la madera en tu cocina sin tener que lidiar con listones de madera uno a uno. Es un material económico que puedes encontrar con distintos acabados y colores. No se necesita hacer obra, simplemente se atornilla en la pared. Por otro lado, si quieres ocultar azulejos rotos, anticuados o tapar imperfecciones en la pared, los frisos rastrelados pueden ser de gran ayuda.

La pintura de pizarra tiene tantos amantes como detractores. A algunas personas les encanta el concepto, otras, solo piensan en el polvo de las tizas. En cualquier caso, lo que es una realidad es que la pintura de pizarra o chalk paint es muy decorativa. No hace falta pintar una pared entera, a veces, con pintar parte de ella o una columna es suficiente. Podrás anotar la lista de la compra, recetas, recordatorios, etc. Y si no quieres pintar, existe la versión de pizarra en vinilo, que se quita y pone como una pegatina cualquiera.

En algunas ocasiones, simplemente se necesita un detalle que reavive el espacio, que le ponga chispa y alegría. ¿Es el caso de las paredes de tu cocina? Entonces, necesitas conseguir algunos vinilos decorativos. Hay cientos de miles de diseños, de todos los tamaños y de todos los precios. La mayor oferta se encuentra en tiendas especializadas online, pero los venden en establecimientos de bricolaje y decoración también. ¿Cuál te gustaría poner en las paredes de tu cocina?