Pequeño apartamento de 2 plantas bajo la cubierta de un edificio del siglo XIX. 'Vivir entre tejados'.
Debido a normativas urbanísticas y civiles, la vivienda abuhardillada no permite que nos asomemos al exterior más que por un ventanuco situado en el nivel superior. La propuesta planteada parte de la idea de crear una ventana ficticia abierta a los tejados de Madrid que sea la gran protagonista de la casa. Una gran fotografía mural de este paisaje urbano se ubicará al fondo del espacio principal de modo que se pueda ver desde la entrada y se eliminarán todos los obstáculos (físicos y visuales) del espacio principal diáfano haciendo que parezca más amplio.
Se escoge el blanco como color principal de la vivienda (paredes longitudinales, muebles de cocina...) y se combinará con la gama cromática de estos tejados que va desde los grises a los marrones en el espacio principal e incorporará el celeste o verde agua en el dormitorio situado en el nivel superior y por lo tanto más cerca del cielo abierto
El mobiliario escogido pretende conectar con la idea de sencillez y ligereza que permiten que el espacio parezca más amplio y despejado y a la vez no compita con el mural fotográfico protagonista en el espacio principal.
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