Cómo envolver un espejo para transportarlo en una mudanza

¿Tienes claro cómo envolver un espejo para una mudanza? Puede que nunca lo hayas pensado y de repente te encuentres en esta situación. Pues que no cunda el pánico, porque es más fácil de lo que parece. Con estos consejos y pasos, podrás empaquetarlo como un profesional y olvidarte de que se rompa durante el transporte. ¡Sigue leyendo!
- Cómo embalar los espejos para una mudanza
- Recomendaciones sobre cómo transportar un cristal grande
- ¿Necesitas ayuda con tus mudanzas?
Hacer una mudanza supone tener contemplados muchísimos riesgos. No es raro que los muebles se estropeen, haya objetos que se pierdan... Pero si tomamos medidas, no tiene por qué pasar. Por ejemplo, los objetos más frágiles requieren especial atención. Hoy te explicamos cómo envolver un espejo para una mudanza, qué materiales son los que mejor protegen el cristal y qué precauciones seguir para evitar el desastre.
Cómo embalar los espejos para una mudanza

En primer lugar, a la hora de planificar tu mudanza tendrás que valorar es si solo necesitas el transporte o si también quieres que embalen tus muebles. Si escoges la segunda opción, pagarás más pero te ahorrarás horas de trabajo. ¡Tenlo en cuenta!
¿Has decidido hacerlo tú? Pues estos son los pasos a seguir para envolver un espejo para una mudanza y asegurarte de que llegará en perfecto estado:
1. Pega una cruz de cinta adhesiva
Este primer paso no evitará que la luna se rompa. Pero si esto sucediera, la cinta mantendrá los trozos en su sitio, previniendo cortes y accidentes. Es una medida de protección que siempre se debe tomar: basta con pegar dos trozos de cinta ancha y resistente a modo de diagonales, de una esquina a la otra y formando una X. Si el espejo es ovalado o redondo, colócalas cruzadas formando un +.
2. Protege las esquinas
Tanto si el espejo va enmarcado como si es tan solo una luna, las esquinas son la parte más delicada. Antes de embalarlo, coloca esquineras de cartón: las puedes hacer tú reciclando cajas o con cartón comprado, o adquirir protecciones específicas que te garantizarán un transporte seguro.
3. Cubre ambas caras con cartón rígido
Corta dos paneles de cartón grueso y rígido, a la medida de la parte frontal y trasera del espejo. Pon el espejo sobre un panel, coloca el otro encima y precinta todo con cinta de embalar. Asegúrate de que el espejo queda bien "atrapado" y que no se mueve. Si lleva marco, no pegues la cinta directamente sobre él: protégelo con plástico, cartón o papel.
4. Envuélvelo en un material protector
Envolver el espejo en mantas viejas o con varias vueltas de plástico de burbujas es una buena alternativa cuando valoramos cómo embalar muebles para una mudanza. Sujétalos con precinto para asegurarlos.
5. Transpórtalo en una caja especial
Por último, a la hora de envolver un espejo para una mudanza no hay que olvidar el embalaje final. Conviene introducirlo en una caja específica para su transporte, que se ajuste a su forma y tamaño y evite que "baile". Si hay huecos, rellénalos con plástico de burbuja o papel; también puedes hacer tú la caja con planchas de cartón. Nunca guardes más de un espejo en cada caja.
6. No olvides etiquetarlo
Por último, pega etiquetas con la palabra FRÁGIL (en gran tamaño y bien visible) en todos los laterales de la caja. Servirán como advertencia para su manejo, y serán tu "coartada" en el caso de que el espejo se rompiera y quieras reclamar el dinero del seguro.
Como verás, envolver un espejo para una mudanza supone un trabajo detallado y complejo, que además implica invertir en material. Por esta razón, uno de los mejores trucos para hacer una mudanza es contratar el embalaje de los objetos más frágiles a la empresa y empaquetar tú los que no necesiten tanta protección.
Recomendaciones sobre cómo transportar un cristal grande

Cuando pensamos en cómo sobrevivir a una mudanza, transportar cristales puede ser uno de los quebraderos de cabeza que nos quiten el sueño, ya que se trata de un tipo de mudanza sin cajas. No solo hablamos de espejos: también pueden ser encimeras de mesas, puertas de vitrinas, baldas de cristal... Estos consejos te serán de ayuda:
Usa un etiquetado bien visible
Cuando etiquetes los cristales con la palabra "frágil", en lugar de escribirla tú pega cinta adhesiva de alta visibilidad. Pégala por todos los laterales: es mejor que sobre...
Transpórtalo en vertical
Aunque parezca extraño, los espejos y los cristales grandes deben ir siempre en posición vertical. Si los colocamos tumbados, pueden quebrarse por su propio peso. Los vehículos deben contar con soportes adecuados y resistentes para llevarlos en esta posición, y que garanticen su estabilidad.
Mejor solo, que acompañado
Intenta que el cristal no vaya acompañado de muchos más objetos, y asegúrate de que estos están perfectamente inmovilizados. No presiones el contenido del vehículo para meter más cosas.
Contrata un seguro específico
En la empresa, pregunta si existe algún seguro específico que cubra este tipo de objetos. Si es así, contrátalo: merece la pena sobre todo cuando hablamos de mudanzas de una ciudad a otra o mudanzas internacionales.
¿Necesitas ayuda con tus mudanzas?

Si alguna vez has hecho una mudanza, sabrás lo complicadas que pueden resultar. Incluso la más sencilla necesita planificación, organización y muchas horas de trabajo. Por supuesto, si tienes ganas, ayuda y un vehículo adecuado, puedes hacerla tú; pero en la mayoría de los casos, merece la pena recurrir a empresas de mudanzas que te garanticen un transporte rápido y seguro.
Además, las compañías especializadas proporcionan otros servicios que te pueden interesar: embalado y desembalado de objetos, colocación de muebles en las habitaciones, vaciado y rellenado de armarios, instalación de lámparas, etc.
Y por último, un consejo más: antes de empezar con el lío, dedica unos días a investigar cuánto cuesta una mudanza en tu zona, cuántos días por mudanza te corresponden y si me pueden negar el día de mudanza. Lo agradecerás si quieres hacer tu mudanza en un día.