¿Cómo pintar un barco?

Como en cualquier trabajo de bricolaje, antes de empezar a pintar tu barco necesitas hacerte con un buen arsenal. Recuerda que es fundamental proteger bien la zona de alrededor y las superficies que no vayas a pintar: cuanto menos tengas que limpiar mejor. Y por supuesto, no descuides tu seguridad. Ponte ropa de trabajo resistente y cómoda, usa guantes y utiliza una mascarilla adecuada a los productos que vayas a emplear.

¿Todo listo? Estos son los materiales y herramientas que necesitarás para pintar tu barco:

• Brochas. Las brochas son imprescindibles para pintar bordes, esquinas, rendijas y piezas pequeñas. Si vas a utilizar una nueva, cuidado porque puede perder cerdas. Para evitarlo, pásala antes por un papel de lija y déjala 1 día en un bote con agua templada. Y si vas a utilizar brochas usadas, asegúrate de que están bien limpias.
• Rodillos y alargador. Salvando la pistola con compresor, el rodillo es la mejor opción para pintar una embarcación. Pregunta en la tienda qué tipo de rodillo es adecuado para la pintura que vayas a utilizar y el tamaño del barco. Hazte también con un alargador: te resultará muy cómodo para llegar a todos los rincones y alturas.
• Pistola de pintura y compresor. Es la opción más profesional para pintar embarcaciones. Es más complicada de usar, pero los resultados son impecables. Si no tienes un equipo de este estilo, puedes valorar alquilarlo durante un fin de semana. Eso sí: asegúrate de que sabes manejarla o no le sacarás partido. 
• Pistola de aire caliente. Esta herramienta te ayudará a eliminar la pintura vieja. Tras ablandarla con la pistola, solo tendrás que retirarla con una espátula y lijar la superficie a fondo después.
• Lija. Antes de pintar, lo normal es lijar la embarcación para dejar la superficie lisa y con agarre. Puedes lijar a mano, pero lo mejor es utilizar una lijadora orbital. Empieza haciendo una pasada con lija gruesa y termina con lija fina para un resultado perfecto. 
• Disolvente (acetona). Cuando se explica cómo pintar un barco, hay que tener en cuenta algunos aspectos. Por ejemplo: es importantísimo saber que tipo de pintura se aplicó en origen sobre el casco. Si lo vas a decapar no pasa nada, pero si vas a pintar encima tendrá que ser un producto del mismo tipo. Para saberlo, haz pruebas con acetona como te indicamos en el paso a paso a continuación. 
• Imprimación. Aplicar una imprimación antes de pintar garantiza un buen agarre, además de asegurar la resistencia de la capa de pintura frente al desgaste y el paso del tiempo. Merece la pena.
• Cinta de carrocero. Es fundamental para proteger zonas y para pintar detalles como letras, números o franjas de distintos colores. Escógela de buena calidad, para que no se rompa ni despegue la pintura cuando la retires.
• Pintura para barcos. Podemos encontrar distintos tipos según su composición y sus prestaciones. Más adelante te contamos cuáles son. 

Si ya tienes el material y las herramientas y has protegido bien la zona donde vas a trabajar, ¿a qué esperamos? Ya puedes empezar a pintar tu barco para darle una nueva vida. Sigue estos pasos para un resultado impecable:

1. Limpia a fondo las zonas a pintar. Usa un desengrasante potente para eliminar la suciedad, los restos de moluscos o algas, etc. Aclara y seca perfectamente.
2. Elimina la pintura descascarillada. Si la pintura del barco se está desprendiendo la tendrás que retirar. Puedes eliminarla con la pistola de calor y una espátula, aunque si son solo zonas pequeñas también las puedes lijar y rellenar. 
3. Haz la prueba del disolvente. Moja un paño en acetona y frota la pintura. Si no se altera y solo deja un poco de color, es una pintura de 2 componentes. Si por el contrario, el paño arrastra la pintura, se tratará de un producto de 1 componente. Según el resultado, elige un producto u otro para que sea compatible con la base.
4. Rellena los desperfectos. Los golpes, grietas y las pérdidas de pintura se rellenan con masilla de poliéster de 2 componentes especial para embarcaciones. Aplícala, alisa, deja secar y lija. Aprovecha para lijar toda la zona a pintar con una lijadora a batería (las pequeñas de tipo delta son las más cómodas y eficaces). Haz una pasada con lija gruesa y remata con lija fina.  
5. Protege con cinta. No olvides cubrir las zonas que no vayas a pintar con cinta de carrocero y plástico.
6. Aplica la pintura. Quita el polvo con un paño y alcohol. Pinta la superficie con brocha y rodillo o con pistola. Aplica manos finas, con pasadas horizontales y volviendo a empezar desde el extremo cuando termines (no hagas pasadas sobre la pintura ya aplicada). Deja secar el tiempo que indique el producto antes de dar otra capa.
7. Barniza los detalles. Si el barco tiene partes de madera (el mástil, los asientos, el timón...), líjalas y barnízalas con un barniz especial para embarcaciones.
8. Quita la cinta de carrocero.

La elección de la pintura dependerá del tipo de acabado que lleve la embarcación. Cuando hagas la prueba del disolvente averiguarás qué pintura lleva: ese será el tipo que tendrás que elegir. Pero si retiras la pintura vieja por encontrarse en mal estado, podrás escoger la que mejor se ajuste a tus necesidades.

Productos de 1 componente

Son barnices y pinturas que se secan por evaporación, al contacto con el aire. Son fáciles de utilizar y más económicos que los de 2 componentes, pero también son menos resistentes y duraderos.

Productos de 2 componentes

Su nombre es "productos epoxi" y viene del nombre de las resinas empleadas en su formulación. Se presentan en dos envases: en uno va el producto en sí (pintura, barniz, masilla...) y en otro más pequeño el endurecedor. Al mezclar ambas partes, la mezcla comienza un proceso de fraguado químico que genera acabados de alta dureza. Estos productos son más difíciles de manipular y más caros que los de 1 componente, pero ofrecen la máxima resistencia al roce, al desgaste y al paso del tiempo.