No es lo mismo un dormitorio de soltero/a que un dormitorio de matrimonio. Básicamente, porque no es lo mismo vivir solo/a que compartir un espacio tan íntimo y personal como es el dormitorio con tu pareja. Representan dos ecosistemas diferentes que se unen para convivir en una misma habitación. Cada uno con sus gustos y manías, con sus horarios y rutinas. ¿Una misión imposible? Para nada, se trata de un reto emocionante a nivel decorativo y organizativo. Descubre cómo sacarle el máximo partido a tu dormitorio de matrimonio.
En este artículo
- Equilibrio en la distribución del espacio
- Un dormitorio sin género
- Aprovechar la pared del cabecero
- Un vestidor detrás de la cama
- Dividir ambientes
- Minimalismo para ganar espacio y practicidad
- Cabeceros de obra
- Aprovechar las ventanas
- Que no te falte de nada
Equilibrio en la distribución del espacio
Todos necesitamos tener nuestro propio espacio vital, incluso en el dormitorio, aunque solo lo pises al despertarte y al irte a dormir. En general, el tráfico que se genera dentro de un dormitorio es mucho menor que el que se da en otras estancias del hogar. No obstante, hay que distribuir la cama y los muebles de forma que ambos miembros de la pareja se puedan mover por el dormitorio con libertad y comodidad. Si es posible, intentar que en ambos lados de la cama haya el mismo espacio. Y si la distribución no lo permite, que ambos se puedan levantar y acostar, vestir y desvestir sin tener que hacer maniobras raras o darse de bruces contra la pared o un mueble.
Un dormitorio sin género
Los dormitorios que son excesivamente masculinos o excesivamente femeninos pueden hacer que alguno de los miembros de la pareja no se sienta cómodo o identificado en ese espacio. Y aunque siempre hay quién no
le da mucha importancia a la decoración, lo óptimo seria buscar un estilo con el que ambos se identifiquen. Es importante sentir que tu dormitorio es tuyo y que ese espacio te transmite paz para descansar. Hoy por hoy, tanto en mobiliario como en textiles existen muchísimas opciones para decorar un dormitorio con neutralidad de género sin renunciar a la belleza.
Aprovechar la pared del cabecero
Uno de los problemas que tienen muchos dormitorios de matrimonio es el almacenaje. Porque dos personas, necesitan el doble de espacio, sobre todo en los armarios. Una solución práctica es utilizar la
superficie de la pared en la que se coloca el cabecero, para hacer un armario a medida, que rodee la cama. Fíjate en la imagen, se ha optado por un sistema de armarios invisibles (sin tiradores y de color blanco igual que el resto de las paredes), que hacen de armario y cabecero decorativo al mismo tiempo.
Un vestidor detrás de la cama
En la línea del ejemplo anterior, el espacio que se necesita para poner el armario, es una de las grandes cuestiones a nivel de distribución de todo dormitorio. Si tienes la suerte de tener un dormitorio amplio, puedes montar un vestidor de una forma tan sencilla como la que ves en la imagen. Consiste en desplazar la cama hacia delante y aprovechar el especio de detrás para instalar una zona de armarios. Un cabecero de obra un poco más alto de lo habitual hará de frontera visual entre tu cama y el vestidor.
Dividir ambientes
Otra forma de incluir un vestidor en el dormitorio es colocarlo en uno de los extremos de la habitación. Pero puedes dar un paso más y levantar un muro de pladur para que sea un auténtico vestidor, un espacio diferenciado y separado del resto del dormitorio. De este modo, si uno de los dos se levanta antes para ir a trabajar, puede vestirse sin molestar demasiado al otro.
Minimalismo para ganar espacio y practicidad
Para que dentro del dormitorio haya un buen entendimiento respecto al orden, el estilo minimalista es la mejor opción: pocos muebles, bien puestos y todos ellos funcionales. No falta ni sobra nada. Con esta filosofía, se gana espacio en el dormitorio y se mantiene mejor el orden.
Cabeceros de obra
Los cabeceros de obra con mesitas de noche integradas satisfacen varias funciones a la vez, lo que nos permite ganar espacio y funcionalidad. Por un lado, satisface su función de cabecero de cama. Por el otro, la repisa que forma junto a la pared, sirve para colocar distintos objetos como libros, fotos o lámparas. Y para rematar, integra las mesitas de noche, ya sea hacia fuera (una mesita pegada al cabecero) o hacia dentro, en forma de hornacinas.
Puedes aprender más ideas sobre qué poner encima del cabecero de la cama de matrimonio.
Aprovechar las ventanas
Si tienes ventanas bajas en tu dormitorio, ponles una repisa y aprovecha ese espacio para colocar objetos decorativos o plantas. Debajo de la repisa, en el hueco que se forme, y si no hay radiadores, también puedes colocar cestos para crear espacios extra de almacenamiento para guardar zapatos, libros, revistas, etc.
Que no te falte de nada
El dormitorio de matrimonio es un espacio muy personal y no a todo el mundo le sirven las mismas “recetas”, así que, como último consejo: que no te falte nada de lo que para ti es importante, aunque rompa las normas de la "perfecta combinación". El estilo ecléctico y tener un mueble de cada manera también es una opción. Por ejemplo, si prefieres tener una pequeña cómoda al lado de la cama en lugar de una mesita de noche tradicional o una chimenea decorativa, ¿por qué no?
Descubre más ideas sobre cómo decorar una habitación de matrimonio moderna.
hace 7 años
Si se consigue el equilibrio a la hora de distruibuir el espacio y también con la decoración desde luego el éxito está asegurado
hace 7 años
Soy muy fan de aprovechar las ventanas en cualquier tipo de estancia, creo que es la mejor opción para conseguir un espacio que merezca la pena visualmente