En este artículo
- ¿Qué posibilidades hay si un vecino se niega a pagar ascensor?
- ¿Tienen que pagar el ascensor los vecinos que se opusieron a su instalación?
- ¿Cómo se determina si el propietario debe contribuir o no?
¿Qué posibilidades hay si un vecino se niega a pagar ascensor?
Es uno de los temas que genera más conflictos y discusiones, algunas enquistadas en el tiempo, en el seno de una comunidad de vecinos. Nos referimos a cuando surge o se plantea la posibilidad de instalar un ascensor para salvar las escaleras de los pisos que hay en ese edificio. En ocasiones, esta decisión no se toma por un simple capricho o un añadido estético o arquitectónico a ese inmueble, sino que parte de la necesidad para proporcionar accesibilidad y facilidades a todos los vecinos; sobre todo si estos tienen una edad o bien padecen algún tipo de discapacidad.
Lo primero de todo es notificar a esas personas que no quieren pagar su parte que se iniciará un proceso judicial contra ellos por el impago de un gasto que ha sido aprobado por la comunidad vecinal.
Si esto no surte efecto y esa reforma corre prisa y se instala el ascensor, los gastos derivados del mismo se pueden dividir o bien entre aquellas personas que sí estaba a favor de su colocación (usuarios que tendrá una llave para poder usarlo, cosa que no tendrá el vecino que se niega a pagar el ascensor) o, pro otro lado, entre todos los vecinos.
¿Tienen que pagar el ascensor los vecinos que se opusieron a su instalación?
Leyendo lo anterior, uno ya puede deducir que todos los vecinos están obligados a asumir su parte de gastos cuando se trata de pagar una derrama en ese inmueble, como puede ser el caso de colocar un ascensor. Esto atañe entonces también al vecino que se niega a pagar el ascensor. Todos deben pagar con independencia de si van a usar o no ese sistema de subida y bajada.
¿Cómo se determina si el propietario debe contribuir o no?
Sin volver a lo ya comentado, cuando se trata de determinar si hay o no una obligación de contribuir al pago de ese ascensor por parte de los dueños de las casas de ese bloque de pisos, es importante precisar una diferencia importante. Y es que no son los mismos los gastos de mantenimiento o reparación de un ascensor que ya está instalado (pero se ha averiado), que aportar los costes pertinentes a la instalación de un ascensor nuevo (ya sea para sustituir por completo al anterior que ha quedado totalmente obsoleto o bien porque nunca ha existido este sistema de elevación en dicho edificio).