Cómo hacer una rampa de acceso universal paso a paso

Si quieres saber cómo hacer una rampa de hormigón, es que quieres facilitar el acceso a personas con movilidad reducida a un espacio (por ejemplo, a un garaje) y hacerlo más seguro. ¡Eso es genial!
Pero como todo, se necesita una planificación adecuada y los materiales correctos. De ambas cosas te vamos a hablar en este artículo, donde te vamos a guiar paso a paso en la construcción de una rampa de accesibilidad hecha de hormigón.
Desde la evaluación del espacio hasta darle un acabado antideslizante a la superficie, pasando por la preparación del terreno, te lo contamos todo al detalle.
- Materiales esenciales para construir una rampa
- Cómo construir una rampa de hormigón de accesibilidad paso a paso

Materiales esenciales para construir una rampa
Antes de construir una rampa de acceso universal tienes que reunir todos los materiales. No son muchos, pero cada una de ellos es clave para que la rampa sea funcional y, sobre todo, segura:
- Hormigón para la base: imprescindible para la construcción de la rampa de accesibilidad debido a su durabilidad y resistencia. Se obtiene haciendo una mezcla con arena y grava que te contamos más en profundidad en otro artículo sobre cómo hacer hormigón.
- Caucho, vinilo o madera para el revestimiento (opcional): proporcionan una superficie antideslizante esencial para prevenir resbalones. El caucho y el vinilo son especialmente útiles en exteriores debido a su resistencia a la intemperie, mientras que la madera tratada puede ofrecer una apariencia más estética en interiores.
- Soportes metálicos (opcional): como vigas o perfiles de acero. Se usan en rampas que requieren una mayor resistencia o que se encuentran en ubicaciones donde el terreno no es suficientemente firme para soportar el peso del hormigón por sí solo.
- Barandas (opcional): de aluminio o acero inoxidable. En el caso de ponerlas, van a ambos lados de la rampa y a una altura que permita un agarre cómodo para los usuarios.
- Franjas podotáctiles: superficies de textura y color diferenciados que se colocan al inicio y al final de la rampa. Están diseñadas para alertar a las personas con discapacidad visual sobre el cambio de nivel.
Todos estos elementos también te sirven si lo que quieres es dotar a tu garaje con rampa. Al final, el objetivo siempre será que puedan usarla personas con movilidad reducida, así que no cambian.
Cómo construir una rampa de hormigón de accesibilidad paso a paso
Vayamos a lo que interesa: el paso a paso de cómo construir una rampa de hormigón, que son 8:
- Calcular las medidas de la rampa.
- Preparar la superficie.
- Fabricar un encofrado de madera.
- Fijar los tableros del encofrado.
- Preparar el hormigón.
- Verter la mezcla.
- Dar algo de textura a la superficie de la rampa.
- Prestar mucha atención al secado de la rampa.
Si visualizas el proceso y ya te has asegurado de todas las normativas locales y nacionales que has de cumplir (las tienes en el Código Técnico de Edificación), entonces ya puedes empezar a seguir el paso a paso detallado:

1. Calcular las medidas de la rampa
El primer paso es determinar las dimensiones adecuadas de la rampa. Para ello has de calcular la pendiente y la longitud necesarias para salvar el desnivel existente.
La pendiente debe ser suave, no mayor al 10%, para facilitar el acceso a personas en silla de ruedas.
En cuanto a la longitud, la fórmula básica para calcularla es dividir la altura a salvar por la pendiente deseada y multiplicar por 100. Por ejemplo, para una altura de 20 cm y una pendiente del 10%, la longitud sería de 200 cm.
2. Preparar la superficie
Todavía no empezamos a construir. Antes, hay que preparar el terreno donde se ubicará la rampa para asegurar que quede bien asentada.
Fundamental limpiar el área de escombros y vegetación, y nivelar el suelo para crear una base estable. Si el terreno es de tierra, compacta bien el suelo para evitar asentamientos futuros. Si es pavimentado, puedes picar ligeramente la superficie para mejorar la adherencia del hormigón.
Además, excavar una pequeña trinchera en el extremo de la rampa puede ayudar a evitar que se forme un escalón al final.
Si vas a usar algún soporte metálico, este es el momento de ponerlo. Tendrás que excavar y fijar las vigas o perfiles de acero en el suelo.
3. Fabricar un encofrado de madera
El encofrado es una estructura de madera que se utiliza para contener el hormigón mientras se seca. Puedes construirla utilizando tableros de madera que sigan las dimensiones exactas de la rampa.
Ten en cuenta que si la rampa está junto a un muro, solo será necesario un lado del encofrado.
Una vez hecho, comprueba que el encofrado esté bien alineado y nivelado para evitar deformaciones en la rampa. También, que no haya huecos grandes por donde el hormigón pueda escaparse.
4. Fijar los tableros del encofrado
Una vez construido, fija el encofrado al suelo con estacas o soportes para mantenerlo en su lugar durante el vertido del hormigón.
También puedes usar varillas de hierro, que se fijan al suelo con un mazo si es tierra, o mediante orificios en pavimentos.
Un método alternativo es utilizar codos de apoyo y pesos para mantener el encofrado en su sitio.
5. Preparar el hormigón
Prepara la mezcla de hormigón utilizando cemento, arena, grava y agua. Para agilizar, y también para conseguir la consistencia correcta, puedes usar hormigón premezclado que solo requiere la adición de agua.
Puedes remover la mezcla con una varilla batidora acoplada a un taladro o manualmente con una pala.
Ojo: sigue las instrucciones del fabricante y usa la cantidad mínima de agua. Si te pasas, el hormigón no se asentará bien en el encofrado.
6. Verter la mezcla
Vierte el hormigón en el encofrado, comenzando desde un extremo y avanzando hacia el otro.
Al verter, es importante hacer dos cosas: primero, distribuir la mezcla de manera uniforme con una palabra, y segundo, alisar la superficie con una regla de albañil o un listón de madera.
El objetivo es eliminar huecos, protuberancias y burbujas de aire que puedan quedar atrapadas. Luego, asegúrate de que el hormigón llene completamente el encofrado y esté nivelado.

7. Dar algo de textura a la superficie de la rampa
Mientras el hormigón aún está húmedo, crear una textura rugosa que ofrezca tracción adicional en la superficie y evite que la rampa sea resbaladiza.
Esto se puede hacer con un escobillón para crear estrías, o con una llana para hacer surcos.
Este también es el momento de añadir las franjas podotáctiles, antes de que el hormigón se seque por completo, para que se adhieran correctamente.
Debes colocarlas de manera transversal al sentido de la marcha, en ambos extremos de la rampa.
8. Prestar mucha atención al secado de la rampa
El secado y curado del hormigón es un paso crítico, porque afecta la resistencia final de la rampa.
Durante las primeras 24h horas, es importante mantener la superficie húmeda para evitar grietas. El truco es cubrirla con plástico o rociarla con agua cada poco rato, sobre todo si hace mucho calor.
Después de 48 a 36 horas, y una vez seca la rampa, el encofrado puede retirarse. Durante todo el periodo evita cualquier carga sobre la rampa hasta que el hormigón haya alcanzado su resistencia completa.
Con estos pasos ya tendrías tu rampa de hormigón hecha. Tan solo quedaría, si así lo tenías previsto, añadir las barandas una vez que el hormigón haya secado y el encofrado haya sido retirado.
Para instalarlas tienes que perforar el hormigón para fijar los postes de soporte, y luego comprobar que están firmemente anclados para soportar el peso y la presión ejercida por los usuarios.
¿Lo ves un proceso largo o no estás seguro de acertar con las medidas? Pregunta a nuestros profesionales cuánto cuesta hacer una rampa para discapacitados, ellos te asesorarán y te darán un presupuesto acorde a tus necesidades.