Vivir en edificios residenciales implica bastantes beneficios para propietarios e inquilinos pero no todo es oro lo que reluce. El desperfecto de zonas comunes suele ser fuente de problemas y situaciones desagradables. Por ejemplo, ¿qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos generados en ellas? Saber qué dice al respecto la Ley de Propiedad Horizontal y qué procedimientos podemos seguir supone llevar mucho adelantado para solucionar cuanto antes el problema. ¡Te invitamos a conocerlos!
En este artículo
- ¿Qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos?
- ¿Qué dice la Ley de Propiedad Horizontal y sus obligaciones?
- ¿Qué hacer si la comunidad no responde?
¿Qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos?
Cuando la comunidad no arregla los desperfectos con las reparaciones necesarias hay que informar al presidente o administrador de la finca. Si esto no tiene resultado, puedes pagar la reparación y luego reclamar el coste a los vecinos, o presentar una denuncia. Es probable que alguna vez te veas en esta situación, si es que no la has vivido ya con la consiguiente impotencia de no saber muy bien cómo actuar.
Realmente hay diferentes procedimientos para denunciar el problema y resolverlo cuanto antes. ¿Los vemos?:
Informar al presidente o administrador de la comunidad
Si eres el principal propietario afectado por esos daños generados en zonas comunes de la finca de tu edificio, este es el primer paso a seguir antes de recurrir a otros procedimientos. Lo ideal es que la comunicación no sea verbal, mucho mejor por escrito, así quedará constancia de la petición, podrás especificar al detalle todos los daños causados y solicitar la reparación de los mismos en el menor plazo de tiempo posible. También es conveniente que quede plasmado el problema en el libro de actas de la comunidad. Ya sabes por dónde empezar, qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos.
Presentar un escrito detallando la petición y enviarlo por burofax
Puede ocurrir que no haya respuesta por parte de la comunidad ante el comunicado escrito exponiendo el problema. O más bien la respuesta sea el silencio. ¿Te ha pasado? Prueba con esta fórmula, da mayor seguridad y peso jurídico a la hora de reclamar y solo consiste en redactar un texto donde se solicitará el arreglo de los daños causados.
En este caso es necesario mandarlo vía burofax certificado, o bien entregarlo en mano con un acuse de recibo porque de esa manera te aseguras administrativamente de que la comunidad lo ha recibido sí o sí. Es otra vía eficaz ante el problema qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos de la finca donde vivimos.
Pagar por la reparación y reclamar los gastos a la comunidad
Cuando la comunidad continúa sin responder, no contesta a estos escritos, puedes optar por asumir el arreglo de esos desperfectos causados en zonas comunes de la finca como una vía rápida para arreglarlos y después reclamárselos a la comunidad. Sobre todo si son daños que conviene reparar urgentemente para no agravar el deterioro de esas zonas o elementos.
Quizá la solución pase por contratar los servicios de empresas de reformas, guardar la factura oficial de lo que ha costado el trabajo de reparación y presentársela a la comunidad de vecinos para solicitar su reembolso. Si considera que no debe hacerse responsable de tales gastos, entonces lo más conveniente es reclamársela jurídicamente presentando una denuncia con escrito de aviso y la factura correspondiente.
¿Qué dice la Ley de Propiedad Horizontal y sus obligaciones?
La Ley de Propiedad Horizontal (Ley 49/1960) es el marco legal que regula todo lo relativo al reglamento de obras en comunidades de propietarios y, por tanto, también establece obligaciones concretas cuando se niegan a solucionar este tipo de desperfectos. El nuevo texto actualizado y vigente también es conocido como Ley de Comunidades y no deja dudas sobre la obligatoriedad de realizar constantes mejoras para la conservación y mantenimiento de estos inmuebles en dichas zonas.
Artículo 10 de la Ley de Propiedad Horizontal
Es el que más interesa a la hora de ver qué hacer cuando la comunidad no arregla los desperfectos. Por un lado, establece que todos los propietarios están obligados a conservar y mantener en perfecto estado no solo su vivienda, sino todas las zonas comunes existentes en la edificación. Y por otro, contempla la necesidad de llevar a cabo aquellos trabajos de conservación y mantenimiento precisos para asegurar el funcionamiento adecuado y la seguridad requerida en dichas zonas y elementos comunes. Obras que pueden suponer el arreglo de techos, escaleras, ascensores, paredes y cualquier otro elemento considerado común. En ocasiones te puede suceder que las obras del vecino han roto mi pared.
¿Cuáles son las reparaciones obligatorias de la comunidad de vecinos?
Realmente, no todas las reparaciones se evalúan con la misma gravedad. En función de su urgencia se encuadran en tres tipos de obras o trabajos y lo más aconsejable es manejar un presupuesto de reforma de comunidades actualizado para su ejecución:
- Obras urgentes. Aquí entran todas aquellas que exigen un arreglo casi inmediato y en un plazo de tiempo breve. Un caso muy habitual puede ser solucionar unas goteras.
- Obras necesarias. En ellas se encuadran aquellos trabajos realizados de forma periódica para garantizar el buen estado de las instalaciones de la finca. Uno de los ejemplos más claros es el mantenimientos de las bajantes.
- Obras de mejora. Como su nombre indica están pensadas para modernizar o mejorar zonas e instalaciones comunes que se han quedado obsoletas, y tal vez poco funcionales, y así es cómo son presentadas a los propietarios. Entre las más habituales figura renovar el portal o actualizar los porteros automáticos.
¿Qué hacer si la comunidad no responde?
Aunque no es ni mucho menos lo más deseable y beneficioso para los vecinos de estos inmuebles, a veces esta se resiste y olvida que la Ley de Propiedad Horizontal respalda a los propietarios ante estas situaciones. Será el momento de adoptar una serie de medidas más rotundas con objeto de hacerla ver que debe asumir su reparación. Decisiones para poner fin a un problema como es qué hacer si la comunidad no arregla los desperfectos:
Hacer constar el problema de forma escrita en la junta de propietarios
Debe estar informada de lo que sucede, comunicárselo adjuntado la documentación pertinente de los daños generados en las zonas comunes afectadas. A través de ella es posible exigir a la comunidad que valore la situación, la gravedad de los desperfectos y adopte una solución eficaz a corto plazo.
Las juntas de vecinos tienen potestad para tratar estos problemas y adoptar las mejores decisiones con objeto de resolver un problema que no se ha solucionado por otras vías. También estas reuniones son el lugar propicio donde discutir posibles reclamaciones y si no sale de ellas un acuerdo favorable, pensar en otras medidas.
Presentar una demanda en el juzgado si no se toman medidas
Puede ocurrir que después de la junta de propietarios celebrada, la comunidad continúe sin solucionar el problema. Ante este panorama, lo más recomendable es recurrir a la vía judicial presentando una demanda en el juzgado. En concreto una orden judicial de reparación o responsabilidad hacia ella ante su falta de actuación para poner punto y final a la situación.
Para acreditar la veracidad de la demanda es preciso aportar documentación y pruebas sobre los daños de las zonas, posibles gastos de trabajos realizados mediante facturas oficiales, etc. Cuando la sentencia es favorable al propietario, la comunidad está obligada a pagar el importe de la reparación que haga falta de forma inmediata, sin plazos a largo o medio plazo.
Realizar la reparación por cuenta propia y reclamar su importe a la comunidad
La última medida drástica cuando las anteriores se han agotado y no han funcionado es afrontar el arreglo de los daños por nuestra cuenta y posteriormente reclamar a la comunidad lo que nos haya costado. Ahora bien, este proceso requiere cumplir una serie de requisitos para que sea efectivo y no haya sorpresas:
- La comunidad de vecinos debe estar informada y autorizar la realización de dicha reparación mediante una solicitud por escrito.
- En caso de que no conteste o no autorice, se pueden iniciar aquellas obras consideradas como urgentes.
- La factura de los trabajos realizados debe ir a nombre de la comunidad de vecinos, no del propietario aunque la haya pagado él.
- Pasar la factura a la comunidad para que se haga cargo del importe de los gastos afrontados y pedir su reembolse a la mayor brevedad posible.