Sin embargo, cuando se piensa en energías renovables a la cabeza vienen la energía solar, la eólica… pero en pocas ocasiones uno se para a pensar que dentro de la categoría gas, pueden existir opciones en este sentido. Te explicamos cuáles...
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El gas renovable
En este caso, este tipo de gas se consigue del reciclaje tanto de la basura doméstica, como de los residuos urbanos, la depuración de aguas residuales de alcantarillados y o del tratamiento de residuos agrícolas, ganaderos y de la industria agroalimentaria.
Un origen que ayuda a que se evite el calentamiento global del planeta, además de mejorar el aire que se respira al no emitir contaminantes locales.
Por si fuera poco, esta producción de gas renovable favorece el desarrollo rural con lo que se promueve la creación de empleo local y se mejora la gestión medioambiental de los residuos de este ámbito. Además, entre sus beneficios están aquellos relativos a la transición energética al tratarse de una energía renovable versátil que se puede emplear en un ámbito doméstico, industrial, comercial o de transporte y que, en caso de excedentes, se puede almacenar.
Una vez se obtiene, su canal de distribución a los consumidores se hace por medio de las redes de gas ya existentes con lo que el usuario puede utilizarlo para los mismos usos que en el caso del gas natural.
Tipos de gas renovable
Una vez se conoce la particularidad de este tipo de gas que procede o es producido a partir de materias primas o de fuentes renovables, es importante conocer los tipos principales de gases renovables:
Biogás: que se obtiene mediante el proceso de digestión anaerobia de materiales orgánicos biodegradables, principalmente residuos orgánicos domésticos, industriales, agrícolas, lodos de depuradora y deyecciones ganaderas. El biogás está compuesto principalmente por metano (40%-70%) y CO2 (60%-30%) y puede inyectarse de forma sencilla en las redes de distribución de gas natural ya existentes y usarse para el mismo fin que el gas natural.
Biometano: un gas parecido al gas natural y que se obtiene del biogás mediante un proceso de depuración que se conoce como “upgrading” y con el que se eliminan distintas impurezas y se consigue aumentar el porcentaje de metano en la mezcla hasta valores superiores a un 90%.
Gas sintético (Syngas): que sale tras el proceso de gasificación térmica de materiales orgánicos, principalmente lignocelulósicos (residuos forestales y agrícolas) o a través de la metanación del hidrógeno.
Hidrógeno renovable (o verde): Son varios los métodos cuando se habla de la producción de hidrógeno, así como de distintos tipos de hidrógeno en función de las fuentes y métodos de producción utilizados para su generación. Sin embargo, ni el gris ni el azul son considerados como gases renovables, algo de lo que solo se puede hablar en el caso del conocido como verde. En este caso es producido por electrólisis del agua a partir de electricidad proveniente de fuentes renovables. Un sistema que no emite CO2 y transforma el agua en moléculas de gases de hidrógeno y oxígeno, usando electricidad producida por fuentes renovables.
El papel de Nedgia en la mejora
del medio ambiente
En Nedgia, compañía del grupo Naturgy que es líder en la actividad de distribución de gas natural en España, se consolida la importancia del gas natural al jugar un papel clave en la transición energética global hacia una sociedad baja en carbono.
Todo encaminado hacia una sociedad más limpia y descarbonizada.
Es por eso que desde Nedgia se acelera la incorporación de gas renovable en su red de gas para que el que se consuma en los hogares sea cada vez más renovable. Por eso, si quieres pasarte al gas natural y dar un paso más en el cuidado y mejora del medio ambiente, solo tienes que entrar en Nedgia.es.