Seguro que en alguna ocasión has notado esa sensación de frío y te has sorprendido al mirar el termómetro: “¿17ºC? pero si juraría estar a menos de 10 ºC” Este problema es debido al exceso de humedad, que además de ser molesto puede ser perjudicial para nuestra salud, especialmente para personas que sufren asma, problemas respiratorios o enfermedades en la piel o huesos.
No te pierdas estos consejos para evitar malos olores y otros problemas de condensación. La mayoría de los remedios son baratos, rápidos de ejecutar y bastante efectivos. ¿Empezamos?
En este artículo
- Abre las ventanas y ventila tu vivienda
- Extractor de aire en el baño
- Vigila la temperatura de la calefacción
- Instala un deshumidificador y verás la diferencia
- Tender la ropa dentro, ¿sí o no?
- Sustituye las ventanas de aluminio
Abre las ventanas y ventila tu vivienda
Uno de los trucos más sencillos, cómodos y baratos para conseguir la humedad recomendada en casa, pero que a menudo no realizamos como es debido, es la ventilación. Airear la casa es una tarea que hay que realizar diariamente. El mejor método es la ventilación cruzada, abriendo las ventanas de los extremos del domicilio para que la corriente limpie la atmósfera interior.
Ventila tu cocina, cuarto de baño y lavandería mientras los usas o justo después. Porque el aire exterior, normalmente contiene menos vapor de agua, lo que “diluirá” la humedad del aire interior. Esto ocurre automáticamente en las casas antiguas por las constantes filtraciones de aire exterior.
Extractor de aire en el baño
Los aseos deben contar con aberturas de extracción para evitar la humedad y garantizar la salida de aire “viciado”. El extractor de aire para baño es un aparato eléctrico, discreto y fácil de instalar, que permiten airear y ventilar la estancia eliminando también el moho y los malos olores. Es un dispositivo que además mantiene las paredes, suelos y juntas en buen estado a pesar de la presencia de vaho y humedad en el cuarto de baño, porque al evacuar el aire hacia el exterior se evitan las condensaciones.
Vigila la temperatura de la calefacción
La calefacción lo que hace es calentar el aire, y el aire cuanto más caliente esté, más capacidad tiene para contener vapor de agua. En invierno al bajar la temperatura encendemos la calefacción de casa, y muchas veces lo hacemos por encima de la temperatura recomendable, por este motivo podemos agravar nuestro problema de humedad por condensación. Una temperatura interior en invierno de unos 19-20º C es más que suficiente para estar cómodo y además ahorrar en calefacción, para mantener esta temperatura y regularla es recomendable utilizar un termostato. Pruébalo, evitarás muchos de los problemas de humedad en tu hogar.
Instala un deshumidificador y verás la diferencia
Ante esta situación en nuestra vivienda un deshumidificador puede convertirse en la posible solución. El deshumidificador es ideal para mantener a raya la humedad. Eliminar el exceso de condensacion es posible mediante materiales desecantes. El aire pasa a través del desecante, que con una reacción química condensa la humedad. Cuando el material absorbente llena sus poros de agua, la deshumidificación se detiene y habrá que sustituir el desecante. Algunos materiales no necesitan ser sustituidos: se regeneran al entrar en contacto con una corriente de aire. Se trata de una solución ideal para eliminar la humedad de nuestro hogar.
Tender la ropa dentro, ¿sí o no?
La ropa húmeda llega a emitir más de 500 gramos de agua al ambiente cada hora, con las consecuencias que ya conocemos. Si quieres quitar la humedad de tu casa, es más recomendable tender la ropa en lugares abiertos o exteriores, un sitio acondicionado como una terraza o un tendedero siempre que sea posible. Y es que si después de lavarla, dejas la ropa tendida dentro de tu hogar, esta provocará que aumente mucho la humedad. Asimismo, también puede resultarte muy útil el uso de secadora para evitar que la ropa húmeda incremente la humedad relativa de tu casa. Aun así, deberás tener en cuenta que no todas las prendas pueden secarse con este electrodoméstico.
Sustituye las ventanas de aluminio
Las puertas y ventanas son elementos de entrada de aire frío que debemos de evitar en invierno. Una solución muy efectiva es instalar burletes, piezas de neopreno o gomaespuma en las aberturas de entrada, tapando los huecos de entrada de aire.
Además si las carpinterías son metálicas se transmite fácilmente a través de los perfiles generando en el interior zonas frías. El aire del interior de la vivienda está a mayor temperatura que el aluminio lo que provoca que al entrar este en contacto con la superficie fría de la ventana, el agua contenida en el ambiente llegue a su punto de rocío y se condense, apareciendo gotitas en el marco. Por eso es recomendable sustituir las ventanas por unos buenos perfiles de PVC que aumentarán el aislamiento térmico y mejorarán el confort del hogar.
¿Dispuestos a evitar la humedad y sus consecuencias? ¡Manos a la obra!
hace 5 años
Gracias por los consejos: simples y efectivos
Saludos