Las cocinas abiertas se imponen en el mundo del interiorismo. Motivos no faltan: son una excelente solución para las viviendas más pequeñas. No obstante, no todas las cocinas abiertas son iguales. Las que cuentan con dos frentes, por ejemplo, son una alternativa muy a tener en cuenta, pues están llenas de ventajas para la vivienda, tanto decorativas como funcionales. Os hablamos un poco de ellas mencionando algunas de sus ventajas más llamativas.
En este artículo
- Una distribución inteligente
- Ventajas en el triángulo de trabajo
- Doble espacio de almacenamiento
- Elige bien los electrodomésticos
- Campanas para todos los gustos
- Separación extra: paredes de cristal
- Una barra para comer
Una distribución inteligente
Las cocinas abiertas con dos frentes tienen una distribución muy particular. Se trata de colocar dos tramos de encimera enfrentados. Uno, apoyado en la pared; el otro, completamente abierto al resto de la estancia, generalmente un salón o comedor. Esto permite, por un lado, tener estancias con menos tabiques, más diáfanas y luminosas, y disfrutar de una cocina mucho más amplia, conectando con el salón o comedor sin necesidad de cambiar de habitación. Si la parte que no está apoyada por la pared tiene los dos laterales libres, conseguirás una circulación óptima, pudiendo entrar y salir por estos dos espacios.
Ventajas en el triángulo de trabajo
El triángulo de trabajo es una teoría desarrollada en los años 40 que consiste en conectar las principales zonas de trabajo de la cocina formando, como bien indica el nombre, un triángulo. Esto permite mejor movimiento, recorridos más rápidos y funcionales. Teniendo en cuenta que este triángulo cuenta con zona de almacenamiento (frigorífico), zona de preparación y limpieza (fregadero) y zona de cocción (fuegos), podemos ver que con los dos frentes la formación del triángulo se facilita enormemente.
Doble espacio de almacenamiento
Al contar con dos frentes, no sólo encontrarás dos zonas de encimera, también espacio extra para almacenar. Las cocinas abiertas en dos frentes presentan dos hileras de muebles ideales para almacenar todo el menaje de tu cocina. En la parte que se apoya en la pared, además, podrás colocar muebles altos sin problema. Ten en cuenta que, además, esta distribución te permitirá una mejor ubicación de los electrodomésticos, tanto los que están integrados en los muebles como los pequeños electrodomésticos que quedan encima de la bancada.
Elige bien los electrodomésticos
Quizá uno de los inconvenientes que pueden preocupar más a la hora de apostar por una cocina abierta es el tema de los electrodomésticos, también en las cocinas abiertas de dos frentes. Hay una creencia bastante extendida con el tema de las campanas, por ejemplo, que asegura que no consiguen absorber todos los olores. Además, el ruido típico de lavavajillas también puede echar para atrás. Tranquilidad, hay solución para todo. Los avances en el mundo de los electrodomésticos permiten cocinas abiertas sin ruido. Pero, además, las campanas extractoras actuales tienen suficiente potencia para poder absorber todos los olores y humos sin problema alguno. Apostar por buenas marcas con electrodomésticos eficientes siempre es la mejor opción.
Campanas para todos los gustos
Y si hablamos un poco más de las campanas, debes saber que cuentas con varias opciones. Puedes colocar la zona de fuegos en el frente pegado a la pared. En este caso, las campanas decorativas o las que se integran en muebles altos (grupos de extracción) son las ideales. Si prefieres la zona de fuego en el otro frente, a modo de isla, debes recurrir a las campanas para isla, las decorativas de toda la vida o las modernas campanas a techo.
Separación extra: paredes de cristal
Si no terminas de creer en la fiabilidad de tus electrodomésticos, también puedes hacer falsas separaciones. Por ejemplo, podrías colocar un cerramiento de cristal en el frente que queda abierto. De esta forma, seguirás contando con la amplitud de este tipo de cocinas, pero poniendo una barrera que ayudará a minimizar, aún más, olores y ruidos. Visualmente es una opción que encaja con cocinas de tipo industrial, sobre todo si se recurre a los cerramientos con perfilería en negro.
Si no terminas de creer en la fiabilidad de tus electrodomésticos, también puedes hacer falsas separaciones. Por ejemplo, podrías colocar un cerramiento de cristal en el frente que queda abierto. De esta forma, seguirás contando con la amplitud de este tipo de cocinas, pero poniendo una barrera que ayudará a minimizar, aún más, olores y ruidos. Visualmente es una opción que encaja con cocinas de tipo industrial, por ejemplo, sobre todo si se recurre a los cerramientos con perfilería en negro.
Una barra para comer
¿Necesitas más motivos para decidirte? Además de más espacio de almacenaje y las ventajas en cuanto a funcionalidad se refiere, estas cocinas abiertas con dos frentes te permiten colocar una zona de desayunos. Si siempre has querido tener una barra en tu cocina, ahora es el momento. ¿Cómo se consigue? Simplemente ensanchando un poco más la bancada. Puedes hacerlo por la parte lateral o bien por la parte trasera, la que da al resto de la estancia. Deja espacio suficiente para poder colocar platos y vasos sin interrumpir el funcionamiento normal de esa parte de la cocina. Además, intenta que la parte inferior no esté ocupada por muebles bajos para poder colocar taburetes y que queden recogidos.
hace 7 años
Un sí rotundo a las cocinas abiertas. Creo que son una opción genial, sobre todo en las viviendas más pequeñas. Los ambientes de ejemplo son preciosos.
hace 7 años
A mí me gustan mucho y estéticamente estas son una pasada, el tema de los olores y tal ya no sé cómo será pero son ideales