Cada persona es un mundo y los diferentes estilos de vida determinan también la decoración de cada hogar. A la hora de elegir los pavimentos es fundamental saber cual es la necesidad de los usuarios. No necesita el mismo suelo alguien que pasa poco tiempo en casa que una familia numerosa, ni una cocina con poco uso necesitará un pavimento tan resistente como la que sí lo tenga.
Hoy os ponemos 5 ejemplos de 5 suelos para 5 estilos de vida diferentes que os pueden servir de inspiración.
¿Familia numerosa? Apuesta por el vinílico

Las familias numerosas necesitan suelos resistes que puedan con todo. Los pavimentos vinílicos son resistentes y antideslizantes. Además, su mantenimiento y limpieza es muy sencillo y eso es muy importante si tienes niños que lo ensucian todo sin que te haya dado tiempo a limpiarlo. La capa superior de poliuretano los protege frente a la suciedad y su desgaste es inferior a la mayoría de los pavimentos.
Como os hemos contado muchas veces, los suelos vinílicos han evolucionado mucho y no tienen nada que ver con los de hace unos años. Son perfectos para las entornos con niños ya que su composición impide el crecimiento de bacterias y la acumulación de ácaros. Incluso, en los dormitorios de los peques puedes elegirlos con una capa extra de amortiguación. Un pavimento resistente que hará más fácil la vida a las familias.
¿Estás de paso pero necesitas un cambio? Prueba con un suelo de resina epoxi

Os hemos contado muchas cosas sobre los pavimentos de resina epoxi, (como en en este post) son muy adecuados para renovar el suelo de tu vivienda sin quitar el pavimento existente. Por esa razón, son estupendos si tu vivienda es “de paso” y, aunque tu estancia no vaya a ser muy larga, necesitas un cambio. Con un coste inferior a otros suelos (tampoco es cuestión de gastar mucho si es para poco tiempo), son además pavimentos autonivelantes y fáciles de aplicar.
Se pueden elegir diferentes acabados y gran variedad de colorido. Son perfectos si el suelo original es antiguo y no te gusta y quieres darle un aire nuevo de un modo rápido. Es un material con mucha durabilidad, impermeable y resistente a la abrasión y se puede utilizar también en cocinas y baños, así que puedes igualar el suelo de toda la casa.
¿Sueñas con vivir en el campo? Lo tuyo es el suelo de terracota

Si tu sueño es vivir en el campo y te gusta lo rústico, sin duda el suelo de terracota es una estupenda opción. Es, digamos, un “material de toda la vida”, muy típico de casas rústicas pero que puede perfectamente incorporarse a pisos y casas urbanas. Se puede colocar tanto en el formato clásico cuadrado como en otros como hexágonos. Una de las características de este material es su aspecto heterogéneo ya que el proceso de su fabricación no es del todo industrializado. El color depende de la arcilla que se emplee en la fabricación de las baldosas y puede ser más rojizo, más marrón, o más amarillento.
Para que su durabilidad sea mayor, se puede dar una capa protectora para que no resulte tan poroso. El suelo de barro cocido puede limpiarse y mantenerse de forma normal, con agua y un jabón neutro una vez colocada esa capa. Un suelo atemporal que hará las delicias de los amantes de lo rústico.
¿Eres una persona “cocinillas”? Prueba con el microcemento o el caucho

Una cocina necesita un pavimento resistente al desgaste y que soporte la humedad. Y esto es aun más importante si eres un cocinillas y te pasas horas y horas a los fogones. Un suelo perfecto para los que aman cocinar es el microcemento ya que, al ser un pavimento continuo, garantiza la impermeabilidad y resulta perfectamente higiénico. Con aditivos, puede hacerse de casi cualquier color.
Otra opción perfecta si te apetece dar un toque de color a tu cocina es el caucho natural, que tiene entre sus características su fácil mantenimiento y limpieza y las durabilidad. Además, es impermeable, resistente al agua y antideslizante y flexible. Hay una amplia gama de texturas y calidades para que tu cocina luzca tan bonita como tus platos.
Si eres ecologista y estás comprometido con el medio ambiente, el bambú es lo tuyo

Si das mucha importancia a que tu vida sea lo más ecológica y sostenible posible, a la hora de elegir el suelo de tu hogar es importante que puedas seguir con esta misma filosofía. Una buena opción es la madera de bambú. Su resistencia, durabilidad y sostenibilidad son sus tres principales características. Es sostenible porque el ciclo de crecimiento de la planta es muy superior a la de otras especies. Además, su composición fibrada le da una resistencia comparable al metal, y una dureza mayor que el roble o el iroko.
Es un pavimento perfecto para quienes buscan opciones eco respetuosas con la naturaleza sin renunciar a un suelo bonito. Su apariencia es similar a la de la madera convencional pero con una veta más marcada. Se puede barnizar o tintar, aunque lo normal es encontrarlo al natural o con tonos rojizos. Y, sí, se puede usar también en las cocinas y baños.
hace 4 años
Nada nuevo
hace 4 años
Estoy esperando a que me llamen, para darme un presupuesto de reforma en mi baño