La cerámica es uno de los materiales que mejor resultado dan en las paredes de baños y cocinas. Resistente a la humedad, fácil de limpiar y más duradera que cualquier otro revestimiento, es un clásico que no pasa de moda. Pero para lograr que brille con luz propia, es importante mantenerla en buen estado e impedir que se acumule la suciedad.
Para ello, existen productos y métodos que logran una limpieza y una desinfección perfectas: a continuación, te explicamos cómo limpiar juntas y azulejos en el baño y la cocina, y analizamos los remedios caseros más eficaces.
Cómo limpiar azulejos en baños

En el cuarto de baño, los azulejos suelen acumular restos de jabón y champú. Sobre todo, en la zona de la ducha o bañera y en el frente del lavabo. Estos restos no son complicados de eliminar; pero muchas veces, también nos tenemos que enfrentar a la aparición del moho. Se manifiesta en forma de manchas oscuras y difíciles de eliminar en las juntas entre azulejos y la silicona aplicada entre los sanitarios y el alicatado. Suele ser bastante habitual en el borde de la bañera, sobre todo cerca de la grifería.
El moho aparece con la humedad y el calor. Por lo tanto, la primera medida para prevenirlo es ventilar bien el baño después de cada ducha. Si no hay ventana, es recomendable instalar un extractor eléctrico; eliminará la humedad ambiente, evitando la condensación. Después, para retirar las manchas sigue estos pasos:
- Ponte mascarilla, guantes y gafas de protección. Procura ventilar bien el espacio.
- Aplica un producto eliminador de moho en las juntas. Déjalo actuar el tiempo que indique el envase.
- Aclara bien, frotando si es necesario con estropajo y cepillo.
- Si el moho está en las juntas de silicona, quítalas y vuelve a aplicar el producto. Elige una silicona fungicida de buena calidad.
Limpiar los azulejos con vapor es una excelente medida para eliminar los restos de jabón, champú, etc., rápidamente y sin esfuerzo. No dudes en utilizar la vaporeta: dejarás el alicatado impecable sin necesidad de emplear detergentes. Y si quieres dar un aire nuevo al espacio sin meterte en obras, pintar los azulejos en el baño puede ser una fantástica solución.
Cómo limpiar azulejos en cocinas

Las paredes de la cocina tienden a acumular grasa y suciedad. Los residuos se van depositando, y si no realizamos limpiezas regulares al final resultarán difíciles de eliminar. Al igual que en el baño, la vaporeta puede ser una excelente aliada para limpiar los azulejos del baño: el vapor a presión es muy eficaz a la hora de quitar grasa, manchas, restos de comida, etc. Pero si no es suficiente, hay otras medidas que podemos tomar:
- El amoniaco es el producto de limpieza más eficaz contra la grasa. No olvides ponerte guantes y mascarilla a la hora de utilizarlo, y abrir ventanas y puertas. Vaporiza, espera unos minutos y aclara.
- Una alternativa al amoniaco, que no deja de ser un producto tóxico (hay países en Europa donde está prohibida su venta a nivel doméstico) son los productos desengrasantes. No desprenden olor, no son agresivos para la piel y son bastante eficaces. Solo tienes que vaporizar, esperar y frotar con estropajo para eliminar restos de grasa.
Cuando pasan los años, para tener un alicatado impecable puede no bastar con limpiar las paredes a fondo. Las juntas, por ejemplo, suelen oscurecerse. En estos casos, tienes la opción de pintar los azulejos en la cocina o de blanquear las juntas. Existen esmaltes especiales y rotuladores para juntas, que ofrecen excelentes resultados.
Métodos caseros para limpiar los azulejos
Existen varios métodos de limpieza para los que no es necesario emplear productos específicos: basta con utilizar los “básicos” que tenemos en la cocina. Bicarbonato, vinagre blanco, jabón, limón, agua caliente… Pueden dar buenos resultados, siempre que la suciedad no esté demasiado incrustada. A continuación, te contamos cómo limpiar los azulejos del baño y de la cocina con productos económicos y asequibles:
- Limpiar azulejos con bicarbonato. En un barreño, mezcla bicarbonato de sodio, agua caliente y vinagre. Frota con un cepillo para eliminar restos oscuros de las juntas, y pasa un paño húmedo y retira los restos.
- Limpiar azulejos con agua oxigenada. Mézclala con bicarbonato, lavavajillas y un chorrito de agua caliente, y vaporiza la mezcla en la pared. Deja reposar unos minutos para reblandecer la suciedad; retírala con bayeta y aclara.
- Limpiar azulejos con vinagre. El vinagre es un fungicida natural, perfecto para eliminar hongos y moho de las juntas. Mézclalo con agua caliente y frota con cepillo de cerdas duras, insistiendo en rincones y esquinas de difícil acceso. Aclara con agua.
- Limpiar azulejos con alcohol de quemar. Es efectivo para eliminar los restos más pegados en los azulejos. Humedece un paño y frota con fuerza.