Así pues, no nos parece mala idea ponernos manos a la obra y preparar la caldera para el otoño. Un buen momento para hablar de diferentes opciones de combustible. En este caso, de las ventajas de las calderas de gas natural para nuestros hogares.
En este artículo
- Calderas con buena acogida en el mercado
- Un combustible convencional que cuida el aire que respiramos
- Gas natural como solución versátil
- Termostatos que ayudan a ahorrar
- Calderas seguras, pero con mantenimiento
- Un acceso e instalación sencillos
Calderas con buena acogida en el mercado

Sí, está claro que hay otras fuentes de energía para calentar nuestra casa (tanto para el agua caliente como para los radiadores). No obstante, si nos basamos en datos veremos que las calderas de gas natural siguen siendo las grandes favoritas. ¿Motivos? Muchos. Para empezar su rendimiento energético, el cual es superior al de cualquier otra fuente de combustible. Esto significa que será necesario consumir un menor volumen de combustible, algo que se notará en la factura de suministros (sobre todo si lo comparamos con otras fuentes de energía como la eléctrica).
Un combustible convencional que cuida el aire que respiramos

El gas natural es una energía limpia que respeta el entorno. Podemos decir que es más respetuosa con ese entorno que otros combustibles convencionales. Tras extraerse de la naturaleza, el gas natural se utiliza tal cual en el punto de consumo sin haber experimentado transformaciones químicas. Su combustión emite menos C02 que otros combustibles convencionales como el gasóleo o el carbón. Además, no genera ni ceniza ni residuos sólidos, siendo también las emisiones de NO2 (generadoras de la contaminación urbana) extremadamente bajas.
Gas natural como solución versátil

Las calderas de gas natural también son interesantes si quieres, además de calentar tu casa con un sistema de radiadores, calentar el agua o incluso cocinar. De hecho, el gas natural es una energía ideal para cocinar, lo que facilita enormemente las cosas y hace que sea una opción, además de económica y respetuosa con el medio ambiente, útil y funcional.
Termostatos que ayudan a ahorrar

En otoño e invierno podrás regular mejor la temperatura de tu hogar gracias a los termostatos de gas natural. Para conseguir una temperatura confortable con un bajo consumo, tan sólo debes regularlo durante el día de 19º a unos 21º. Además, según los expertos, si quieres ahorrar más, no es necesario apagarlo cuando estamos fuera de casa (como en el caso del aire acondicionado), durante la noche o cuando no estemos (si os vais una semana casi mejor apagar la caldera) bastará con ponerlo entre 15º y 17º. Además, si tienes alguna estancia de esas que no se ocupan, cierra el radiador y la puerta, así evitarás consumos innecesarios.
Calderas seguras, pero con mantenimiento

Sí, las calderas de gas natural son una de las opciones más seguras. Ahora bien, requieren un mantenimiento. Tienen que ser revisadas una vez al año (algo que tampoco difiere mucho de otro tipo de calderas, para ser sinceros).
En el caso de los radiadores, también es aconsejable purgarlos una vez al año, más o menos a principio de otoño, para que no nos coja el toro. De esta forma pondrás la instalación a punto para el invierno, asegurándote de que el agua se mueve correctamente y no hay burbujas de aire que bajen el rendimiento del radiador. Sea como sea, hay una amplísima red de profesionales que se encargarán de este tipo de rutinas.
Un acceso e instalación sencillos

Las calderas de gas natural cuentan con un fácil acceso para el usuario. Hay que tener en cuenta que el gas se canaliza hasta el lugar de su utilización. Por tanto, tan sencillo como abrir un grifo o válvula para tener suministro constante. Ahora bien, es importante que la zona en la que quieres instalar la caldera cuente con suministro. Para ello, puedes informarte de estos aspectos y de otros también esenciales en Gas Natural Distribución.
No sólo podrás saber si el suministro de gas natural llega hasta tu casa,
también podrás conocer el ahorro que se consigue con este combustible o el
precio de instalación (que suele ser bastante rápida y sencilla). ¡Y sin salir de casa!
hace 6 años
Muchas gracias, la verdad es que hay veces que falta toda esta información y vamos un poco a ciegas por la vida.