Qué debe tener un salón para hacerte feliz

Si desde hace algún tiempo sientes que no estás del todo a gusto en tu salón, algo está fallando. Quizás tu vida vaya por unos derroteros, y la organización y decoración de tu casa, por otros. No te des por vencido ¡ni montes dramas! Esos desajustes entre lo que esperamos de nuestra casa (y en concreto de nuestro salón) y nuestra vida, se pueden solucionar. La felicidad es algo subjetivo. Pero puede alcanzar mucho sentido cuando te relajas leyendo un libro, o viendo tus series favoritas. Incluso llenando tu mesa de amigos y celebrando la vida. Echa un ojo a los consejos que te proponemos, para que tu salón vuelva a regalarte muchos momentos de felicidad.
- 1. Orden
- 2. Capacidad para todos
- 3. Ventilación y buena luz
- 4. La temperatura correcta todo el año
- 5. La luz idónea
- 6. Algo que lo haga para ti único
- 7. Debe ser un salón "disfrutón"
1. Orden

Haz un diagnóstico de lo que hay en tu salón. Como un detective, analiza lo que te gusta y lo que no para saber qué te gustaría cambiar. Si tienes muchos libros repartidos por los muebles, quizás podrías instalarlos en una gran librería a medida. Así liberas espacio para poner una butaca, o un cómodo sofá con chaise-longue de los que te gustan. ¿Y si en lugar de una mesa rectangular pones una redonda? Quizás el problema esté en la distribución, un tabique que molesta o todos esos muebles que acumulas, y que no te sirven más que para agudizar el problema de orden que desde hace tiempo tienes.
2. Capacidad para todos

Este tiempo que hemos estado en casa, hemos podido confirmar que "todos" prefieren el salón. Para ver la tele, jugar, hacer deporte, trabajar... ¡Dejemos de hacer turnos! Convirtamos la sala en un espacio multifuncional, del que todos podamos disfrutar a la vez. Analiza su distribución y busca ese lugar en el que poder crear un espacio de trabajo con capacidad para guardar las cosas importantes, otra zona donde los niños puedan jugar (y guardar sus juguetes), y otro espacio en el que disfrutar juntos de una tarde de peli y palomitas. ¿Cómo? Depende. Quizás sea cuestión de tirar un tabique y ampliar, otras de cambiar 3 muebles por uno a medida que llegue al techo, y sea capaz de guardar en menos espacio más y mejor...
3. Ventilación y buena luz

Todos no tenemos un salón grande con vistas, ni ventilación cruzada. Pero eso no es excusa para no intentar mejorarlo, con soluciones al alcance de todos. Puedes cambiar las ventanas por un modelo batiente, por el que entre más aire y a la vez cierre perfectamente de cara al invierno, mejorando la climatización. Puedes derribar la pared que da al pasillo para además de ampliarlo, conseguir quizás esa ventana cruzada que nos hace falta. También hay sistemas de ventilación que llaman "de doble flujo" que además de ahorrar energía, nos devuelven un aire mucho más puro gracias a su sistema de filtros... Soluciones de todo tipo que un buen profesional te puede recomendar para solventar el problema.
4. La temperatura correcta todo el año

Al hilo de lo anterior, en un salón que se suda la gota gorda en verano y te hielas de frío en invierno, no se puede estar nunca a gusto. ¡Piénsalo! Quizás la felicidad pueda estar en echar una siestecita después de comer en verano, con la temperatura ideal gracias a un sistema de aire acondicionado, o en invierno con una calefacción no demasiado alta para poder echarte por los pies una mantita. Por conductos, eléctrica, de gas, radiante... Según tu bolsillo y las ganas que tengas de hacer reformas, hay muchas soluciones. Elige la que más te convenga y disfruta estando bien a gustito.
5. La luz idónea

Cuidado con esos apliques muy altos, los focos que devuelven una luz fuerte o la mala costumbre de poner un único punto de luz cenital en el techo y nada más. ¡No, no y no! Al estilo de ese hotelito rural que te enamoró, en tu salón debes poner luces cálidas en forma de apliques, lámparas de sobremesa, lámparas de apoyo... Invirtiendo en domótica puedes planificar la iluminación para diferentes momentos. Por ejemplo para relajarte, trabajar con el Pc, recibir a la familia... Con sólo tocar un botón, puedes hacer que tu salón se invada de un placer visual y unas sensaciones, que se pueden acercar mucho a tu concepto de bienestar.
6. Algo que lo haga para ti único

Te puede hacer muy feliz ver en tu salón cada vez que entres, ese papel pintado que te enamora, o un gran sofá tapizado con la tela que tú querías. Pintar una pared de un color que enamore, invertir en una gran mesa de madera artesanal, o colgar unas originales lámparas de fibra. Vestir las paredes desnudas con ladrillos de caravista, o con molduras de escayola para darles ese toque chic que tanto te gusta.
7. Debe ser un salón "disfrutón"

Redescubre soluciones, para que tu salón se convierta en un santuario para vosotros dedicado al ocio o al relax. Para unos quizás se consiga instalando un gran proyector y un perfecto sistema de sonido. Para otros, invirtiendo en una gran librería de madera de roble o DM lacada, que ocupe toda una pared y oculte la tele, o integre la chimenea. Con repisas o sin ellas, con puertas o cajones. Pintada de un color que contraste o totalmente integrada en la pared al ser del mismo color. Simulando una auténtica biblioteca o tan minimalista que se esconde detrás de unas puertas correderas sin manillas.
¿Y tú salón, está a la altura de lo que esperas de él? ¿Te hace sentir alegre y contento? Esperamos que estas ideas os sirvan para inspiraros, y redescubrir vuestra casa para que os haga sentir mejor. Al final, todo se reduce a que uno se sienta superbién en su hogar.