En este artículo
- Areca: una preciosa planta tropical
- Ficus: ideales para interior
- Bambú: la clave está en el riego
- Tronco de Brasil: bello en cualquier rincón
- Ficus benjamina: sencilla y decorativa
- Costilla de Adán: versátil para cualquier rincón de la casa
- La elegancia de la Strelitzia Nicolai
- Cactus: los invencibles
Areca: una preciosa planta tropical

Es de las más decorativas y bonitas porque nos trasladan a un ambiente tropical, de hecho la Areca viene de esa zona y por tanto, necesita humedad. No confundamos la humedad con encharcarla, pues entonces "bye bye Areca". Lo que debemos vigilar es si la tierra está húmeda y cuando no sea así, regarla poco a poco. Así que decimos que es para niños porque no tienes que estar regándola a diario. Si conseguimos eso y que le dé la luz natural, podrás disfrutar de tu Areca durante mucho tiempo.
Ficus: ideales para interior

El ficus necesita mucha luz pero cuidado, no la pongas cerca de una ventana donde entre el sol directamente porque entonces sus hojas se quemarán. Si la tienes fuera de casa, colócala en algún lugar donde le dé el sol y la sombra, para que esté en equilibrio.
No requiere excesivos cuidados y de hecho, son muy recomendables para interior porque aguantan muy bien, pero es importante mantener un ambiente húmedo y regarlas adecuadamente. A partir de ahí, ¡a disfrutar de tu ficus!
Bambú: la clave está en el riego

Esta planta me encanta porque me transmite mucha serenidad y me parece que es una planta muy fácil de colocar en cualquier espacio de la casa. Este tipo de planta, también tropical, requiere de bastante riego, especialmente el tronco de bambú. Con regarlas 3 o 4 veces por semana y alejarlas de la calefacción de los pisos, conseguirás que tu planta florezca y luzca así de bonita.
Tronco de Brasil: bello en cualquier rincón

Creo que es una de las plantas "más duras" para interiores, o lo que es lo mismo: más fáciles de cuidar. El tronco de Brasil no requiere demasiada agua, pero sí estar húmeda y ¿cómo saberlo? Además de tocar la tierra, podemos observar sus hojas: si comienzan a convertirse en un tono marrón o se caen, lo más seguro es que necesiten más riego. Otra de las cosas a tener en cuenta es colocar la planta muy cerca de la ventana, ya que para que crezca necesita mucha luminosidad. Con tener la planta vigilada y siempre húmeda, conseguirás una pieza preciosa para tu hogar
Ficus benjamina: sencilla y decorativa

Para que nuestro Ficus benjamina luzca así de bonito debemos colocarlo cerca de alguna ventana o lugar que reciba mucha luz y regarlo con frecuencia, pero no con demasiada agua. Eso en verano. En invierno, requiere menos agua y por eso, es una planta muy agradecida porque no nos obliga a regarla a diario.
Uno de los consejos a tener en cuenta es recordar las puntas de las ramas, haciéndolo así conseguiremos que las siguientes hojas florezcan con más fuerza y frondosidad.
Costilla de Adán: versátil para cualquier rincón de la casa

Quizá sea una de las más versátiles en tamaño y forma, la Costilla de Adán es una planta super recomendable para interior porque no es muy exigente en general. En verano, lógicamente requerirá un poco más de riego pero el error aquí sería encharcarla y perderla. Por eso, hay que asegurarse de que la tierra se ha secado de una a otra vez. Lo bueno de esta planta es que resiste muy bien los ambientes secos que se pueden producir en el interior de los pisos con calefacción, aunque si podemos evitar que esté cerca del radiador, mejor.
La elegancia de la Strelitzia Nicolai

Colocarla en un lugar donde le dé la luz es perfecta, al igual que en un jardín o terraza con temperaturas suaves. Es fundamental que reciba luz para que pueda crecer bien, aunque no debe darle las horas de sol más fuertes para no quemarla. Es una planta muy elegante y debemos regarla de forma moderada, asegurándonos de que la tierra se seca de una vez a la siguiente.
Cactus: los invencibles

A nadie se le puede resistir un cactus y es que son muy fáciles de mantener porque requieren muy pocos cuidados y son super agradecidos. En invierno hay que regarlos muy poco, dependiendo del ejemplar, pero 1 vez cada 12 días es suficiente. En verano o en climas especialmente cálidos, habría que aumentar la dosis a 1 vez cada semana. No conviene echarles demasiada agua porque no la necesitan. Si realmente se te resisten todas las plantas, ¡prueba con un cactus porque son super resistentes!
hace 1 año
yo recomendaría el Poto además de las expuestas,en mi caso se hizo reforma de baño y cocina ,por mucho que se tapase siempre tenia polvo, pues bien solo se estropearon dos hojas y no solo eso dicen que absorbe el formaldehído producto cancerigeno producido por el tratamiento de la madera,muebles,tableros de partículas, y otros productos de madera prensada