Cortinas de aire: Instalación, aplicaciones y funcionamiento

Empecemos por familiarizarnos con este equipo de ventilación, de qué estamos hablando exactamente y cuál es la función de una cortina de aire. En concreto, la ASHRAE (American Society of Heating Refrigerating and Air-Conditioning Engineers) la define como una corriente de aire controlada unidireccionalmente y capaz de moverse a través de todo el ancho y alto de accesos de grandes dimensiones. De ese modo reduce la transferencia de aire de un lado a otro de puertas y ventanas, además de impedir que el polvo, los malos olores e insectos entren en los espacios interiores.

Su objetivo ya lo podemos ir imaginando. Contribuir a generar espacios más confortables regulando la temperatura interior de locales, negocios, centros comerciales y naves industriales, que es donde más lo recomiendan los profesionales del sector y las empresas de climatización. En definitiva, optimizar su consumo y eficiencia energética.

Cuando una cortina de aire y su instalación queda lista se crea una barrea invisible sobre estos huecos sin limitar el acceso al interior de los espacios de personas e incluso vehículos. Su ahorro energético está demostrado: reduce el coste de calefacción y de refrigeración en un 80% aproximadamente y a la vez mantiene la climatización interior y el confort existentes, proporcionando una atmósfera limpia de plagas, insectos, polvo en suspensión, etc.

Si algo garantiza una cortina de aire es el nivel de confort térmico óptimo al entrar en estos espacios. Las incómodas corrientes o fugas se reducen notablemente en sus interiores. Por ejemplo, en pleno invierno no existe malestar térmico, al revés, se genera una agradable invitación a entrar a estos locales al sentir su aire caliente como una especie de ducha. Resumiendo, instalar una cortina de aire puede ayudar a reducir de forma considerable la pérdida de energía y preservar la climatización de comercios y negocios. Un verdadero reto si tenemos en cuenta los precios récord en electricidad.

Oficinas, restaurantes, tiendas, supermercados, locales industriales… Son muchos los espacios que se ven beneficiados con la colocación de estos equipos de ventilación. Quizá tu propio negocio puede ser un excelente candidato si quieres maximizar su eficiencia energética. Lo ideal es planificar su instalación en plena fase de ejecución y construcción del proyecto, al margen de la actividad que vayas a desarrollar en él. Los resultados de eficiencia energética serán mayores.

Cuando no es posible, siempre se recomienda contratar los servicios de profesionales especializados en estos trabajos de climatización. Barajar varios precios de instalaciones de aires acondicionados es una excelente manera de comparar, ver qué incluye cada presupuesto y decantarnos por el que más se ajuste a lo que necesitamos.

Al margen de ello, existen una serie de requisitos y recomendaciones de montaje que siempre deben ser respetados en una cortina de aire instalación. En concreto estos:

• Colocación del equipo. La máquina siempre ha de ir colocada dentro del local o negocio y no puede quedar expuesta al agua, gases corrosivos ni vapores. En cuanto al soporte, es muy importante elegir una solución resistente a vibraciones, garantizando con ello la seguridad del equipo cuando quede fijado a la pared.
• Espacio mínimo entre la cortina y el techo. Es fundamental respetar el hueco que recomiendan los fabricantes; 5 cm como mínimo entre la parte superior del aparato y el techo del establecimiento.
• Distancia óptima del suelo. También en este apartado existen unos requisitos muy concretos; no instalar la máquina a más de 3 m de distancia del suelo ni a menos de 2,5 m. Cuando no se cumple su eficacia no es igual.
• Cuándo colocar dos unidades. Siempre que el ancho del acceso o entrada sea mayor al del equipo se aconseja instalar una pareja de cortinas de aire, o más. Lo ideal es hacerlo en paralelo y dejando una distancia entre cada unidad de 2 a 4 cm.

Un fallo puede consistir en no haber situado la cortina de aire lo más cerca posible del acceso o entrada para que este flujo cree una barrera en ese hueco cuando permanece abierto. También suele pasar que no se haya dejado suficiente espacio alrededor de sus motores, imprescindible para que el aire de la cortina fluya correctamente, sin encontrar obstáculos, y de esa manera funcionar lo más eficazmente posible.

Otro fallo más habitual de lo esperado es colocar una cortina de aire más pequeña que el hueco o acceso para el que está destinada. El resultado es que quedarán aberturas y se colará aire del exterior, por lo que su principal función, favorecer el ahorro energético, será casi un imposible.

El mantenimiento de estos equipos también puede ser un foco de problemas cuando es escaso o inexistente. Si bien es cierto que los fabricantes no exigen una limpieza y cuidados específicos, es importante cumplir unos aspectos mínimos, como limpiar su rejilla de aspiración periódicamente. Cuando esta pieza acumula un exceso de polvo, lo más normal es que termine pasando al interior de la unidad y que se deposite en los ventiladores. Un nivel de suciedad nada recomendable si queremos obtener de ella un máximo rendimiento y propiciar una larga vida.

Y para terminar, otro de los errores más extendidos es contratar a profesionales que no están especializados en la instalación de cortinas de aire, apenas poseen formación específica y experiencia. Instalar estos equipos de ventilación requiere la intervención de técnicos o instaladores formados para ello, garantizando así que la inversión económica habrá valido la pena y su colocación supondrá apostar por el ahorro y la eficiencia energética.

En estos equipos un jet de aire a elevada velocidad es el encargado de cubrir toda la apertura de la entrada o acceso y su velocidad debe ser suficiente para que vaya dirigido hacia abajo. Este aire permite hacer de barrera entre la temperatura del ambiente interior y la exterior. Aunque a simple vista pueden confundirse con equipos de aire acondicionado, su funcionamiento es muy distinto.

¿Cómo funcionan exactamente? Las cortinas de aire instaladas disponen en sus equipos de rejillas para la entrada de aire, este es comprimido por los ventiladores internos (pueden ser de transmisión directo o por correas) y luego dirigido hacia la boquilla de salida para orientarlo hacia la entrada o puerta abierta.

Otra de las particularidades de su funcionamiento es que pueden hacer descargas horizontales o verticales al expulsar el aire, según las necesidades del espacio, además de regular sus lamas para aumentar el rendimiento de la cortina. Las versiones con calefacción traen una batería eléctrica para calentar o enfriar el jet.

A la hora de funcionar, también pueden hacerlo de diferente manera:

• Mediante un funcionamiento continuo.
• Accionados con mando a distancia.
• Manipulados automáticamente por medio de sensores cuando se produce la apertura de puertas o accesos.

Antes de dar el paso definitivo, averiguar el precio de instalar una cortina de aire porque estamos barajando poner una en nuestro negocio, viene bien repasar la infinidad de usos que hoy día ofrecen estos equipos de ventilación. Son muy adecuados para emplazamientos y espacios con un tráfico constante de personas entrando y saliendo.

De ahí su idoneidad en muelles de carga y hangares, donde se necesita que los accesos permanezcan abiertos con fines logísticos. Y también que sean una solución muy eficaz en espacios comerciales, garajes y talleres donde es básico controlar la temperatura y mantener a raya la contaminación. Sin olvidarnos de su utilidad para ayudar a mantener a distancia a insectos voladores gracias al aire generado.

La lista de ventajas no deja dudas en cuanto a su eficacia para mejorar el nivel de confort térmico de infinidad de espacios. ¿Las repasamos?

• Protegen del aire frío en invierno y del caliente en verano.
• Reducen las corrientes de aire.
• Reducen el paso de contaminación y suciedad.
• Mantienen el ambiente limpio de plagas e insectos.
• Reducen los humos y malos olores.
• Contribuyen a mejorar el confort térmico mediante el control de la temperatura.
• Permiten ahorrar energía.
• Garantizan cero contaminación acústica.
• Son una eficaz barrera ante el humo del fuego.

Una de las clasificaciones más extendidas en las cortinas de aire es por el espacio donde van a ser usadas.

• Cortinas de aire murales para tiendas y comercios. Su presencia permite mantener las puertas abiertas y producir el agradable efecto psicológico de invitar a entrar al cliente. Al tratarse de barreras invisibles, también ayudan a frenar la entrada de contaminación en suspensión, polvo, polen, etc. Cuando son negocios de hostelería se recomienda ponerlas en los accesos a las cocinas para controlar la salida de olores. Son silenciosas en pleno funcionamiento, de manera que no molestan ni al personal que trabaja en esos negocios ni a los clientes. El nivel de protección que garantizan sobre el aire exterior alcanza el 65%.

• Cortinas de aire murales para recintos industriales. La instalación de diseños adecuados con sistemas de control en la apertura de puertas son esenciales para el ahorro energético en grandes espacios, como por ejemplo almacenes logísticos. Cuando se trata de almacenes frigoríficos o cámaras frigoríficas con diferencias de temperatura elevadas, es muy recomendable la presencia de estos equipos para reducir la pérdida de energía entre interior y exterior. La cortina se amortiza en un corto período de tiempo.
• Cortinas de aire murales para locales pequeños. Estas unidades cada vez son más utilizadas en este tipo de establecimientos. Suponen una excelente alternativa para optimizar cada centímetro cuadrado sin renunciar a disfrutar de la temperatura idónea en sus espacios interiores. Y a la vez logrando una mayor eficiencia energética porque consiguen reducir la carga de trabajo en sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado.