¿Tienes un baño largo y estrecho? No desesperes, hay soluciones que te ayudarán a sacarle partido. Si renunciaste a tener un gran baño para darle más espacio al resto de la casa y no tienes muy claro cómo decorar y amueblar esta estancia, te acercamos una serie de ideas que pueden solucionar tus problemas y te permitirán aprovechar al máximo cada centímetro.
En este artículo
Distribución de baños alargados y estrechos
Un baño largo y estrecho tiene muchas más posibilidades de las que tal vez imaginas. El secreto está en jugar muy bien con la distribución. Lo ideal es aprovechar al máximo una de las paredes más largas. Si colocas lavabo, bidé e inodoro en línea, la sensación visual será de mayor ligereza. A la vez, quedará espacio de paso suficiente para circular por el baño sin obstáculos.
Pero esta distribución tiene un pequeño inconveniente: se puede crear un “efecto tubo” que haga que el baño parezca aún más largo y estrecho. Para evitarlo, hay trucos de decoración que funcionan perfectamente. El más sencillo: colocar en una de las paredes estrechas un elemento que sirva de foco de atracción, básicamente, duchas o bañeras.
Si además esa zona se reviste de una forma diferente, como puede ser con azulejos de otro color, la forma del baño parecerá mucho más equilibrada. Puedes combinar, por ejemplo, paredes en blanco o en tonos claros con revestimientos en la zona de la ducha en colores más oscuros, como gris o azul. El baño no parecerá el mismo. También puedes reformar baño sin quitar azulejos, llevando a cabo otros cambios superficiales, sencillos y de lo más vistosos.
8 ideas para decorar un baño largo y estrecho
Si te hasplanteado hacer una reforma en el baño, además de la distribución, es importante que tengas en cuenta otros aspectos como el almacenamiento, los colores de las paredes y del mobiliario, los materiales y la luz, entre otros. Para que vayas tomando nota, aquí tienes algunas ideas que puedes llevar a la práctica en el diseño de ese baño largo y estrecho al que ahora no sabes muy bien cómo sacarle partido.
1. Explotar al máximo el espacio bajo el lavabo
Tenemos dos objetivos: aprovechar el espacio para sacar almacenaje extra y colocar los elementos de forma que no tengamos un baño asfixiante. El lavabo es una pieza clave en esto. Los lavabos sobre encimera te permitirán aprovechar al máximo el espacio que hay bajo de ellos. Además, aunque tengas tentación de colocar muebles hasta el suelo, quizá sea mejor usar suspendidos, pues aligeran mucho el conjunto. Puedes colocar puertas para que tus objetos estén ocultos o bien recurrir a elementos como cestas o cajones de madera, que además de ayudarte a ordenar aportarán un plus estilístico.
Y, como el baño es estrecho, lo ideal es el mobiliario a medida. De esta formar puedes tener un mueble perfectamente adaptado a tus necesidades y a las dimensiones del baño, tanto en fondo como en longitud. Por cierto, la distribución interior es fundamental para optimizar el espacio. Mejor cajones que puertas o gavetas profundas y, por supuesto, sí a los organizadores. Es la mejor forma de tener todas nuestras cosas ordenadas y a mano y no tener que perder tiempo buscando entre el contenido del mueble.
2. Aprovecha la disposición alargada
Si no puedes con tu enemigo, únete a él. Si en la cocina las dimensiones alargadas y estrechas no te amedranten, evita que lo hagan en los cuartos de baño. No intentes cambiar la naturaleza de este espacio, simplemente, explótala. ¿Cómo? Muy sencillo: con muebles alargados que potencien su forma. Los muebles alargados de líneas rectas y fondo estrecho te aportarán, además, mayor elegancia a la hora de decorar, siendo una excelente opción para los baños de corte moderno. Una elección de muebles con líneas más redondas podría hacer de este espacio un lugar más angosto.
Y ya que hablamos del mueble, aprovecha toda la anchura de la encimera y coloca un gran espejo, tendrás un baño el doble de grande, al menos en apariencia. La decoración con espejos en el baño ofrece numerosas posibilidades. Además, potenciará muchísimo la luz, lo que también evitará esa sensación de ahogo que a veces produce un baño estrecho y alargado, sobre todo si no tiene ventanas y no entra luz natural durante el día.
3. Ubicando la ducha en un baño alargado
La disposición de todos los elementos del baño es esencial. En la medida de lo posible, como decíamos al inicio, escoge una de las paredes para colocar lavabo y sanitarios. En cuanto a la ducha, lo mejor es ubicarla en la parte final de la estancia, pues entorpecerá menos y no empequeñecerá el espacio. Normalmente suele ser el lugar en el que, si la hay, se encuentra la ventana. No te preocupes, la ducha, aunque cuente con mampara, no entorpecerá la ventilación. Lo único con lo que tienes que contar es que la ventana debe quedar en el lado contrario a la grifería para evitar en la medida de lo posible las salpicaduras constantes.
Solo si el baño tiene una cierta anchura es posible colocar la ducha enfrentada al lavabo. En ese caso debes tener en cuenta que el ancho mínimo del plato es de 70 cm y que lo ideal es que no dejes una superficie de paso inferior a 80 cm para evitar tener que saltar para cruzar la estancia. Además, esas medidas te servirán para decidir el ancho del mueble del lavabo y comprobar si puedes poner de esta forma la ducha o no. Al final, son las medidas interiores las qeu mandan.
- Un buena distribución es fundamental, aseguraté sobre plano.
- Ubica correctamente los enchufes.
- Pide incluir en el presupuesto final la limpieza, licencias y contenedores de escombros, si son necesarios.
4. ¿Y la bañera?
En un baño alargado y estrecho quizá sea más recomendable colocar una ducha, por eso de aligerar el peso decorativo. No obstante, esto no significa que no puedas tener bañera. Si definitivamente eres más de baños de espuma, también hay posibilidades para ti. Ten en cuenta, sobre todo, que para colocar una bañera necesitarás unas dimensiones específicas, normalmente con 150 cm de ancho hay suficiente, pero infórmate bien sobre las medidas especiales para ver si se acoplan a las tuyas. Colócala también al final, y si tu baño es alargado, pero no tan estrecho, valora la opción de ubicarla en un lateral, siempre y cuando tengas espacio suficiente para pasar.
¿No quieres prescindir de nada? Si el baño tiene suficiente longitud, puedes colocar ducha y bañera. La bañera al fondo, pegada a la pared, y justo delante la ducha con su mampara. Para dar protagonismo a la zona de baño, una idea que funciona es elegir una mampara con perfilería en negro, es elegante y combina con cualquier estilo.
5. Sanitarios para baños alargados
Los sanitarios suelen contar con medidas estándar de 60 a 80 cm de fondo y unos 40 cm, como mínimo, de ancho. Quizá en estos elementos el tema de las dimensiones no se pueda controlar tanto, pero hoy existen opciones más reducidas o que agilizan más el espacio visual, por ejemplo, los sanitarios suspendidos y de fondo reducido. Recuerda también que entre elemento y elemento debe haber entre 20 y 25 cm de separación lateral y 50 cm frontal.
Quizá incluso cabe la posibilidad de aligerar el baño quitado el bidé. Ahora, si no puedes vivir sin él hay otras posibilidades intermedias, por ejemplo, poner un inodoro con función de lavado o una dicha higiénica junto a este. Para baños pequeños son perfectos.
6. Aprovecha el espacio vertical de tu baño
En un baño estrecho y alargado todos y cada uno de los centímetros son oro puro. Aprovéchalos bien. En cuestión de almacenaje, intenta liberar el suelo y apuesta por el espacio vertical. Las unidades de pared son una solución ideal y práctica. Armarios, estantes al aire o incluso muebles de obra a medida, siempre en el plano superior de la pared, pueden facilitar nuestra vida enormemente.
Hay espacios, además, que suelen estar desaprovechados y que son auténticas joyas en lo que a almacenamiento se refiere. Si no, piensa en la parte superior del inodoro. Unas estanterías voladas no solo son perfectas para pequeños productos de uso diario, también pueden dar un toque de estilo a la decoración del baño.
7. Hornacinas en la pared
Siguiendo el hilo anterior, las paredes, en los baños estrechos, son grandes aliadas. Aprovecha este espacio también para colocar hornacinas o nichos. Estudia bien la arquitectura de tu baño y no dudes en colocar estos elementos en zonas como la ducha o bañera.
Volviendo a la zona del inodoro, si tiene una cisterna integrada, una idea muy decorativa es hacer un diseño de hornacinas de diferente tamaño con luces integradas. Se puede llegar hasta el techo sin problemas porque su efecto será de lo más decorativo y, al llevar iluminación, ayudará a ampliar los espacios. Además, tendrás mucho espacio donde dejar cosas.
8. La puerta también es importante
La posición de la puerta también es determinante. Lo ideal es que las entradas en este tipo de baños estén en uno de los extremos, aunque hay baños alargados que también las colocan centradas en uno de los lados más largos de la estancia. Sea como sea, piensa que la apertura de una puerta tradicional puede hacer que pierdas espacio. En un lugar en el que precisamente estamos intentando aprovechar cada centímetro no parece muy oportuno. Así pues, baraja la opción de colocar una puerta corredera. Ganarás amplitud de forma inmediata.
Además, hay modelos realmente decorativos, como son las de tipo granero. Si es un baño integrado en un dormitorio, como ya hay en muchas casas en España, puedes optar por el cristal opaco, de esta manera, además, el cuarto de baño se verá algo más luminoso. Y para optimizar al máximo el espacio, mejor un puerta corredera integrada, que deja todas las paredes libres para poderlas decorars o poner muebles apoyados en ellas.
hace 7 años
Me he enamorado de esa bañera. Parece más pequeña de lo normal, pero lo que me gusta es el revestimiento de madera, supongo que será porcelánico no?
hace 6 años
exelentes ideas ayudan muchisimo
hace 4 años
preciosos y elegantes¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡