Cómo sacar partido a tus cortinas

Que las ventanas pueden ir vestidas hasta el suelo es un hecho, aunque nos sigamos resistiendo a esa idea. Ya no hace falta que acortes las cortinas a ras de la ventana, puedes darle más importancia dejando que lleguen hasta el suelo.

Si te preocupa no poder aprovechar el hueco bajo la ventana, sujeta a un lado las cortinas y déjalas como en la foto. Así podrás poner una mesa o mueble bajo la ventana y darle un toque de estilo a las cortinas.

Este es un indispensable cuando se trata de agrandar una estancia en altura. Si colgamos en lo más alto de la pared nuestras cortinas, la sensación de techos altos se notará mucho más. Es un gesto simple que se puede utilizar en todas las estancias; además, puedes ahorrarte tener que acortarlas, ya que generalmente las cortinas estándar son bastante largas.

Si eres de los que quiere evitar a toda costa ser visto por los vecinos, apuesta por colores oscuros. Es la mejor manera de reservar tu intimidad al 100%. Además es perfecto para evitar la imponente luz del mediodía y descansar sin luces molestas por la noche.

Dale color a toda tu casa empezando por las ventanas. Si no te atreves con una cortina excesivamente colorida, te animamos a buscar cortinas en degradé o hacerlas tú mismo con unas que ya tengas. Funcionan muy bien tanto en vertical como en horizontal, es cuestión de gustos. 

Si tienes unas cortinas sencillas y quieres darle un toque más personal, puedes buscar complementos que encajen con ellas. Existen acabados con pompones muy bonitos, flecos o añadidos de ganchillo que funcionan muy bien con tejidos de algodón. Incluso puedes buscar una barra de cortina especial que añada ese toque que necesitas.

Como en el caso anterior, las cortinas pueden ejercer función de puertas. Si no puedes o no quieres renovar unas puertas de armario, utilizar unas cortinas puede ser igual de práctico que una puerta. El único hándicap es la importancia de lavarlas a menudo, ya que las personas alérgicas al polvo pueden pasarlo mal ‘abriendo y cerrando’ los armarios.

Si no te decides entre las cortinas y los estores, puedes combinar ambas opciones. Esta opción permite usar las cortinas como un elemento decorativo, y el estor para regular la luz e intimidad. Puedes mezclar materiales naturales entre sí como el bambú y el algodón, o unificar colores  y materiales. La cuestión más importante es adaptarlo siempre a tu estilo y comodidad.