Cómo decorar una calabaza para Halloween

Antes de todo, recuerda decirle a tu frutero que te guarde una calabaza por Halloween, con un color naranja bonito, para que el resultado sea genial. Después, con cuchillo en mano, corta la parte superior de la calabaza como si fuera una caja y ¡ármate de paciencia para vaciarla! No es fácil, pero cuanto más limpia la dejes por dentro, mejor resultado obtendrás.  

¿Qué prefieres: una calabaza simpática y sonriente o una calabaza temible y que dé terror? Piensa qué te apetece más por Halloween y una vez decidido, ¡manos a la obra! Coge un lápiz y dibuja el rostro que hayáis escogido en familia. Después, con un taladro puedes marcar sutilmente el dibujo que has realizado, para que a la hora de cortar esas formas, sea mucho más sencillo. 

Ahora sí. Quizá sea el paso más difícil porque de él depende el resultado de nuestra calabaza. Coge taladro, cúter y cuchillo. Aquí vale cualquier utensilio que puedas tener en casa y que te permita cortar sobre la dura superficie que es la piel de la calabaza. ¡Ármate de paciencia, pues aquí no valen las prisas! Cada corte preciso que hagamos, ¡contará para el resultado final!

Cuarto y último paso. El modelo clásico de calabaza por Halloween pasa por iluminarla por dentro. Sin duda, ¡el resultado es genial! Puedes hacerlo con iluminación led o con velas, dependiendo de lo que quieras conseguir. Pero sin duda, la opción con velas es un poco más peligrosa si hay niños, así que ¡cuidado con ella!

Puedes repetir los mismos pasos y decorar no una, sino varias calabazas. De esta forma, puedes decorar un rincón super terrorífico y divertido en casa, perfecto para cuando vas a celebrar Halloween en familia o con amigos. Y completar el ambiente con velas. ¿Te gusta el resultado?

Hemos entendido que hay personas a quienes les puede hacer gracia Halloween y les gusta añadir pequeños toques decorativos, pero sin pasarse. En este caso, las calabazas junto con los murciélagos o algún diy de esqueletos, por ejemplo, serían suficientes. Si además, jugamos con la combinación cromática del naranja y el gris, conseguiremos un espacio muy original pero sin pasarnos.

Si no somos muy de Halloween, pero nos encantan las calabazas, siempre podemos incorporarlas a la decoración de nuestra casa utilizando sus preciosos colores y combinándolos con textiles, alfombras o accesorios. No es un ambiente terrorífico lo que conseguiremos, pero sí un rincón otoñal precioso y lleno de color.