Materiales low cost para una casa 10

Sí, los tableros OSB son una de esas tendencias que nos gustan a rabiar, tanto por características como por precio.  Se trata de tableros de virutas que se forman por diferentes capas y se unen las unas a las otras con cola sintética antes de ser prensadas. Como resultado, un material con gran durabilidad, ecológico y resistente a la humedad. Aunque podemos verlo en paredes y suelos, no hay límite ni fronteras para los tableros de OSB que se atreven con todo. Así, se pueden usar como revestimiento en muebles o incluso en escaleras.  Aunque el precio variará dependiendo su grosor, podemos encontrarlos desde 4,20 euros por m2.

El suelo laminado es ya todo un clásico en la decoración de interiores. También en las soluciones low cost para decorar. ¿Por qué? Muy sencillo. Se trata, primero, de un material con un sinfín de acabados. Ten en cuenta que el suelo laminado se forma por tablones con varias capas. Cada lama cuenta con una base de madera prensada y una última capa hecha de resinas de melanina. Es precisamente esta melanina la que adopta el color y acabado, siendo así posible encontrar, desde suelos laminados que imitan la madera a la perfección, hasta lamas que intentan imitar, con bastante acierto, otros materiales como puedan ser el cemento. Hay variedad también en cuanto a la resistencia, pudiendo elegir lamas con más o menos dureza, dependiendo del impacto que pensemos que recibirán a diario. En cuanto al precio, evidentemente varía mucho en cuestión a lo comentado, no obstante, podéis encontrar suelo laminado desde unos 6 euros por m2.

Si somos sinceros al 100%, el papel pintado es más caro que la pintura para paredes. No sólo el material puede tener un precio más elevado, también su colocación, que necesita mucha precisión. No obstante, también hay que ser justos, se trata de uno de los revestimientos de paredes más económicos, al menos en comparación con otros como puedan ser la madera o la piedra. Una vez aclarado esto, debes saber que el papel es un material muy resistente, también al agua y a la humedad (en modelos especiales). El papel es fácil de limpiar, tapa las grietas e imperfecciones de las paredes al instante y además tiene un poder estético más que evidente. Por tanto, es una opción interesante para combinar con otras, como, por ejemplo, la pintura de paredes.

La pintura sigue siendo uno de los recursos más económicos para decorar nuestros interiores. Las pinturas plásticas, esas que se diluyen con agua y pueden mezclarse con otras para conseguir diferentes tonalidades, abren todo un mundo de posibilidades a un buen precio. No te olvides que la media en presupuestos para pintar viviendas enteras está en torno a los 600 euros.  Ahora bien, hay cosas a tener en cuenta antes de decantarnos por un acabado u otro. Por ejemplo, las pinturas brillantes son más fáciles de limpiar, mientras que las de efecto satinado, aunque quedan francamente bien, son más sensibles a las manchas ¿quieres algo diferente? experimenta con las texturas y pinta tu pared como si fuera una bonita acuarela.

Aunque el suelo laminado convence, los vinilos autoadhesivos ganan la batalla en cuanto a precio se refiere. Es cierto que ambos son sencillos de colocar, pues ninguna necesita retirar el suelo anterior. No obstante, la sencillez de los vinilos va un paso por delante, además de ser superficies antideslizantes, resistentes a la humedad y con un mantenimiento casi inexistente ¿Más ventajas? Imitan mayor variedad de acabados Así, es incluso posible encontrar vinilos autoadhesivos que imitan tendencias tan actuales como las baldosas hidráulicas. Además, los puedes utilizar para poner en el frente húmedo también.

¿Amante de los espacios unificados? ¿Te interesa buscar un separador de ambientes tipo cerramiento de cristal a mejor precio? Tu material es el policarbonato. Aunque los cerramientos exteriores ya han probado las bondades de este material ligero y resistente, ahora, en los interiores, también se empieza a ver. Las paredes de fibra de vidrio son más costosas, y, además, hay que señalar que el policarbonato es prácticamente imposible de romper, con hasta 20 veces más resistencia de una plancha de fibra de vidrio. El policarbonato, además, se encuentra en diferentes grados de espesor, pudiendo encontrar modelos más o menos transparentes. Ahora bien, la luz siempre pasa sin problemas, algo que añade luminosidad al resultado.