Ha llegado el verano y con él los días más largos, los helados y las tardes de piscina, pero también, el calor insoportable dentro y fuera de casa. ¿Ya no sabes qué hacer para poder sobrellevar la ola de calor? Te contamos 5 formas eficientes y sostenibles de evitar el calor dentro de casa.
En este artículo
- Apostar por las energías renovables
- Aislar bien puertas y ventanas
- Protege el interior de tu vivienda de los rayos del sol
- Controlar la temperatura interior
- Zonificar: una mejora poco conocida
Apostar por las energías renovables
¿Has pensado alguna vez en sacarle partido al sol para mantener tu casa fresca durante el verano? En la época estival el sol irradia más energía, con unas placas fotovoltaicas, podrás generar la electricidad necesaria para refrigerar tu casa de manera sostenible. Instalar placas en el tejado es muy fácil, actualmente existen productos como el de Viesgo que te ofrecen una solución llave en mano, con la que podrás comenzar a generar tu propia energía rápidamente. Optar por una solución energética como Viesgo Solar te permitirá refrigerar tu casa con energía 100% renovable, reduciendo tu gasto energético y teniendo visibilidad en todo momento sobre lo que sucede en tu instalación, para que puedas refrigerar tu casa con cada rayo de sol.
Aislar bien puertas y ventanas
De nada servirá que tengas el mejor sistema de refrigeración si tu casa está mal aislada. Revisa las fisuras en las paredes, las filtraciones o cualquier deterioro de la fachada. Arreglarlas no sólo evitará que escape el frescor, también te ahorrará dinero en posibles reparaciones posteriores más grandes. Además, no te olvides de reforzar el aislamiento de puertas y ventanas. Renueva las juntas y, si estás pensando en cambiar las ventanas, escoge los dobles acristalamientos. ¿No puedes cambiarlas? Una solución económica es colocar burletes. Es sencillo, barato y logra su propósito, aumentando el aislamiento de tu vivienda.
Protege el interior de tu vivienda de los rayos del sol
Teniendo en cuenta que hasta un 40% de la temperatura que se pierde en casa es por las ventanas, es necesario que les prestes especial atención. Ya ha quedado claro que el aislamiento es esencial, pero tenemos otros consejos que puedes aprovechar, como reducir el volumen de luz solar que entra en tu casa. Si dejas que los rayos de sol se cuelen por tus ventanas y puertas en las horas de mayor radiación, estarás favoreciendo el incremento de la temperatura del interior. Para evitarlo, protege tus ventanas con cortinas y baja las persianas para evitar la influencia directa del sol.
Controlar la temperatura interior
Para estar fresco en casa, no es necesario recrear el polo. Programar la temperatura de tus aparatos de aire acondicionado entre 24º y 26º durante el tiempo que estés en la estancia será más eficiente que poner el aire a 5º durante 10 minutos. Una temperatura constante no sólo hará que el ambiente sea más confortable, además evitará gastos innecesarios. Si no tienes termostato programable, algo que sería recomendable puedes colocar un termómetro de pared en la habitación para controlar la temperatura. Es importante conocer la temperatura ideal del aire acondicionado en invierno.
Zonificar: una mejora poco conocida
¿Qué es eso de zonificar? En lo referente a refrigeración y al aprovechamiento del frío en casa, zonificar implica no aclimatar las áreas en las que no vamos a estar. Seguro que hay habitaciones que no usas todos los días, como el despacho o la habitación de invitados. Si cuentas con varios sistemas de aire acondicionado, no los enciendas todos a la vez o, si es centralizado, corta los pasos a estas habitaciones, aunque sea cerrando las puertas. Únicamente con ese gesto, consigues que el recorrido del frío sea menor y pueda mantenerse bastante más tiempo en tu vivienda.