En este artículo
- El olor a humedad
- Las antiestéticas manchas
- Las grietas en la cimentación
- Frecuentes episodios de enfermedad
- La importancia de una buena valoración
El olor a humedad
Uno de los indicativos más comunes es el olor a humedad. Es cierto que no todo olor a humedad puede traducirse un deterioro importante de la impermeabilización, pues hay habitaciones que siempre serán más húmedas que otras y hay climas más propicios a esa humedad. No obstante, en la mayoría de casos, las casas suelen tener un olor agradable o neutro. Si aparece repentinamente olor a humedad, es que hay algo que no está funcionando correctamente y debemos llamar a un especialista.Las casas con daños por agua tienden a tener este olor desagradable. Si el olor persiste incluso después de limpiar a fondo, no hay duda de que la vivienda está expuesta con regularidad a la humedad.
El olor a humedad también puede indicar que estamos teniendo problemas de moho y hongos bajo las paredes. Además del olor, la humedad podría estar causando daños estructurales importantes, de ahí la importancia de revistar la impermeabilización de las paredes y techos.
Las antiestéticas manchas
Si hemos tenido un problema de filtraciones pero no nos hemos dado cuenta, es posible que lo hagamos con el tiempo a causa de las manchas. Cuando el agua se seca sobre la superficie de las paredes o techos, aparecerán estas manchas. No hay duda, el agua se está filtrando desde el exterior y es posible que tengamos agujeros o grietas en las paredes.
Las grietas en la cimentación
Uno de los signos más importantes que no debemos dejar pasar es el de las grietas en los cimientos. Esto nos indica que los daños por humedad podrían ser una realidad. Sea como sea, al verlas hay que estudiarlas, pues podría significar que nuestra vivienda es vulnerable frente a inundaciones. Evidentemente estas grietas tienen mayor riesgo cuanto más grandes sean, llegando incluso a ser un peligro absoluto para el edificio. Lo recomendable es que en cuanto aparezcan un profesional pueda valorarlas.
Lo más normal es que se nos recomiende aplicar un impermeabilizante en las zonas que parezcan más vulnerables y que puedan afectar la cimentación de nuestra vivienda.
Frecuentes episodios de enfermedad
En este punto no nos fijamos en la vivienda en sí, nos fijamos en los que vivimos en ella. La humedad en exceso produce moho y hongos, entre otros microorganismos. Hay muchas enfermedades crónicas que se relacionan con la aparición de estos hongos tóxicos en casa.
Si observamos que llevamos una temporada en la que las enfermedades respiratorias parecen instalarse en nuestra vivienda, podría ser interesante revisar todas nuestras paredes y techos.
La importancia de una buena valoración
Estas son algunas de las señales que nos pueden indicar que hay problemas de impermeabilización, sobre todo si contamos con una fachada antigua o si vivimos en el último piso de un bloque de viviendas. Ahora bien, tened en cuenta que no siempre la humedad es una señal de este problema. Hay humedades por obra, que aparecen por causa del agua que se usó durante la construcción en combinación con el tipo de clima. También humedad ambiental o humedad accidental en el caso de que se rompa una tubería. Para valorar esto, es esencial que un profesional acuda a nuestra vivienda y vea si efectivamente estamos ante una humedad por filtración, que es la que nos dice que hay problemas de impermeabilización.