Grandes o pequeñas, de campo o de ciudad. Las terrazas son las protagonistas del verano. ¡Eso es indiscutible! Pero nosotros vamos más allá. Queremos saber qué es lo que de verdad no les puede faltar para que dejen de ser corrientes y pasen a ideales: ¡perfectas! Hoy te contamos 7 cosas con las que tu porche, patio o balcón se puede convertir en tu oasis particular. Y algunos trucos para que cuando lo consigas, no te copie el vecino. Apunta bien...
#1. Acorde a tu estilo de vida

Las terrazas son lugares repletos de posibilidades. Piensa en tus verdaderas necesidades y en tu estilo de vida, y dale a tu espacio la personalidad que necesita. Si tu casa es pequeña, pero tienes un balcón generoso o una terracita, un proyecto de cerramiento te permitirá usarla durante todo el año. ¿Cuál es la clave para hacerlo bien? Planificar bien el espacio y elegir una carpintería exterior adecuada. Si dispones de al menos 3 metros x 1,5 de ancho, merece la pena cerrarla. El aluminio o el PVC son asequibles y fáciles de mantener. El cristal mejor siempre con rotura de puente térmico para evitar el frío en invierno y el temido efecto invernadero en verano. Y con puertas plegables o correderas para sacar todo el jugo al espacio.
#2. Espacio para comer, tomar el sol o no hacer "nada"

Aunque tu terraza o balcón sea muy “mini”, casi seguro se le puede añadir una zona de comedor a tu espacio exterior. Por ejemplo, con mesas abatibles que se adosan a la pared o con sistemas que se cuelgan directamente de la barandilla. Y si no es generosa en metros pero tiene un tamaño medio, no descartes añadir mobiliario de obra. Es la mejor forma de aprovechar todo el espacio y de sentar a más gente (sobre todo en comparación con una mesa convencional). Recuerda que alguna mancha siempre cae, así que, ojo con el pavimento que eliges, que la terraza es para disfrutarla no para sufrirla. Busca el rincón perfecto donde crear un zona de estar cómoda, a la sombra y deja que pasen las horas muertas.
#3. ¿Madera, cerámica o césped artificial?

El suelo de tu terraza puede ser de muchas maneras, pero para que sea realmente excelente debe ser además de bonito, resistente, duradero y anti deslizante. ¿Entonces cuál elijo? Pues eso depende del tamaño de tu terraza, el uso que le vayas a dar y lamentablemente también de tu presupuesto. Ya sabes que la madera natural (pino o tropical) es muy cálida, pero te va a pedir que la trates al menos una vez al año. El composite en cambio, se le parece mucho, y a penas da trabajo porque al final es un suelo de plástico. Las baldosas son todo terreno, y eligiendo un modelo que no resbale, tienes suelo para años. Y si lo que quieres es una solución rápida, resistente a la lluvia y al frío, y muy decorativa, ya sabes, césped artificial.
#4. Sombra segura

Cuando se acerca el verano estamos todos locos por tomar el sol. Pero a estas alturas, cómo se agradece una buena sombra. Si tu terraza es pequeñita, puedes colocar un toldo que puedas abrir o cerrar a distintas horas del día. Si tuviera al menos 2 metros de larga, ya podrías empezar a pensar en una pérgola del material que quieras (madera, aluminio o hierro) que puedas cubrir con brezo, bambú o hasta tableros macizos de MDF, poliestireno o porespán. Recuerda que lo ideal es que tenga una buena cubierta que evacue el agua y resista todo el invierno.
#5. Los muebles imprescindibles

No, eso de sacar a la terraza todo lo que estorba en casa, no es bueno ni saludable. Una terraza magnífica no puede parecer un trastero. Haz limpieza si ya has cometido el error de saturarla o estudia bien lo que de verdad necesitas antes de comprar nada. En la medida de lo posible usa muebles de obra (con mullidos cojines), o soluciones apilables o modulares que puedas unir o separar para acoplarlos bien al espacio. Atrévete a hacer algún mueble con tus manos, usando por ejemplo los palets. Y no te olvides de decorar con muchos cojines y colchonetas que se puedan lavar en la lavadora (algodón o lino, es una buena elección).
#6. Una iluminación creativa

Cuando cae la tarde y con un poco de suerte refresca un poco, es cuando posiblemente más se disfruta la terraza. Por eso y para no ir chocando con los muebles, es importante que tenga una luz correcta. Nuestro consejo es que te asegures una luz general a modo de apliques en la fachada o con balizas en el suelo y después juegues con esos otros elementos que dan luz indirecta. Nos sirven guirnaldas decorativas, lámparas colgantes, maceteros, cubos decorativos retroiluminados o farolillos… Da luz a tu estilo.
#7. Plantas y flores que le den "la vida"

De ninguna manera pueden faltar. Las plantas dan color y aroma a tu terraza, además refrescan el ambiente. Antes de cargar tu coche con plantas de un vivero, asegúrate de que estás eligiendo las más correctas para el clima de tu zona, la orientación de tu terraza, el espacio que tienes y el tiempo que le vas a dedicar. Todo esto es clave para no cargártelas a la primera de cambio, así que no te cortes un pelo y pregunta antes de comprar: si dan frutos que puedan manchar el suelo, si se hace muy alta o si pide mucha agua… Y si buscas intimidad, tira de plantas trepadoras, árboles frutales o hiedras que corran por la valla, muro o pared (y mantengan los ojos de tu vecino a raya). Que esta terraza perfecta, pero también PRI-VA-DA.
hace 5 años
Me gusta la idea de la madera y el césped artificial. Creo que es un matrimonio perfecto para exteriores.