Cómo iluminar tu casa de manera artificial

Son la última tendencia en iluminación. Aportan mucha luz y suponen un ahorro. Las luces led, por su tamaño y características, nos permiten integrar luz donde antes no era posible (gracias a su tamaño) y conseguir el ambiente que queramos gracias a sus diferentes colores e intensidades.

Son ideales para aportar un toque moderno. Sus diferentes puntos de luz hace que no se concentre todo en un único punto visual. Son idóneos para completar con lámparas de sobremesa o de pie. En techos bajos dan una sensación muy cálida. Si se juega con diferentes alturas se consigue una iluminación genérica, decorativa e incluso de ambiente.

Aportan una iluminación puntual que tiene por objeto iluminar un área concreta. También actúa como un complemento a la decoración y acompaña a la luz general. Ahorra espacio y puede utilizarse en muebles translúcidos creando un ambiente moderno y sensorial.

Solo enfocan a un punto concreto y son muy utilizadas para crear una luz ambiental. Este tipo de luz nos permite conseguir atmósferas más acogedoras, definir zonas y transformar la habitación en función del estilo que se desee. Las lámparas con pantalla ancha aportan luz ambiental o difusa con un efecto decorativo, mientras que las de cabezal flexible y pantalla estrecha son ideales para rincones de lectura o lugares donde la luz deba enfocar un punto concreto. La intensidad de la luz suele ser un factor esencial y para controlarlo existen lámparas regulables con diferentes tipos de intensidad. Además, según los tipos de bombillas de coloques, obtendrás una iluminación u otra.

Se conocen como chandeliers, lámparas de araña, arañas de cristal o lámparas de cristal. Son muy versátiles ya que pueden iluminar el salón, la cocina, el baño, la entrada o la habitación. Es mejor aplicarlas en estancias con decoraciones sencillas y lineales. Para conseguir una iluminación general, la potencia total de las bombillas debe estar entre los 200 y 400 vatios.

Este tipo de lámparas se usan normalmente para la luz principal de la estancia. No genera zona de sombras, ni contrastes muy marcados y es ideal para una iluminación general.