El buen tiempo asoma y nosotros seguimos en casa, así que seguro que te apetece retomar esa asignatura pendiente: disfrutar de un huerto en casa. Cultivar los alimentos que vas a comer, tocar la tierra con las manos y ver poco a poco cómo crecen, es una enseñanza preciosa para los niños, y una tarea de lo más relajante para los mayores. Cualquier rincón sirve para cultivar unos tomatitos o unas plantas ¿Quién se apunta a la idea de comenzar un pequeño huerto en casa esta primavera?
Al aire libre

En un trocito de tierra o en unos maceteros grandes. Las mesas de cultivo van genial para ahorrar espacio y decidirse a empezar. Sólo necesitas las semillas, un poquito de agua y por supuesto, sol. Busca ese lugar ideal en tu terraza o patio, e instala allí unos maceteros grandes donde plantar unos ricos tomates. Variedades hay muchas. Infórmate bien porque algunos son más fáciles de cultivar que otros. Además, la variedad también determina la altura de la planta. Y no te olvides del agua: instalando un grifo en la terraza con una manguera retráctil, será más cómodo que con una regadera. Si no cuentas con un suelo antideslizante en la terraza, coloca unos platos debajo de cada una para que la planta drene y no sufráis resbalones.
Empieza por lo más fácil

Para iniciarte en el cultivo del huerto en casa, las hortalizas más fáciles son las judías, tomates, lechugas, fresas, calabacines, pimientos, zanahorias y acelgas. Siempre comienza por pocas especies y ve sumando nuevas a medida que ganes en experiencia. En la terraza, también pueden crecer árboles frutales como melocotoneros, albaricoqueros o higueras. El truco es elegir la variedad enana que ocupa mucho menos espacio. Una terraza es para disfrutarla, y además de un huerto, queremos tener un espacio donde comer, tomar el sol o incluso darnos una ducha fresquita. El truco para disfrutar de todo es un buen diseño.
Haz sitio en tu jardín

Si dispones de un terreno llano, superficie suficiente y agua todo el año, podemos instalar un pequeño huerto familiar en casa. Con las camas de cultivo a nivel de suelo, se facilita mucho la labor porque ahorran el trabajo de labrar la tierra. Además son muy decorativas (si nos cansamos del huerto podemos poner plantas en ella). Recuerda que el riego es fundamental y que su exceso o falta, puede hacer que las plantas mueran. Por eso, dispón de una toma de agua cerca. Un huerto, exige riego constante. Necesitarás un punto de agua próximo a tus cultivos para llenar una regadera o para conectar la manguera, o mejor un sistema de riego automático por goteo o exudación. Consulta a los especialistas porque hay sistemas especialmente pensados para jardineras y mesas de cultivo.
Huerto vertical

Los sistemas verticales, son la mejor solución cuando no disponemos de espacio suficiente. Perfectos para cultivar hortalizas como lechugas o espinacas porque necesitan menos tierra. Son fáciles de sacar adelante, sobretodo si eliges plantas con raíces y hojas que no se hacen muy grandes. Los huertos verticales, son muy decorativos y aprovechan muy bien ese espacio que nos sobra en altura. Se pueden instalar en macetas de polipropileno o incluso en económicos y versátiles sacos de rafia. ¿Y sabes lo mejor? Aparte del regalo que nos ofrecen sus frutos, este frondoso huerto funciona muy bien como pantalla acústica y un buen aislante térmico que suma color, aroma y sabor a tu mesa.
Resalta su belleza

Dentro de las especies del clima mediterráneo, posiblemente el olivo sea una de las más conocidas y emblemáticas. Además de poder ofrecernos deliciosas aceitunas, un olivo es un árbol con un gran valor ornamental. Si quieres que destaque en tu jardín, puedes elevarlo sobre un montículo de tierra en un parterre y acompañarlo de algunas plantas aromáticas y/o decorativas. Usa piedra blanca para crear un espacio aún más decorativo, manteniendo la humedad necesaria y las malas hierbas bajo control. De esta forma puedes concentrar la zona de cultivos a un rincón y aprovechar el resto para poner césped natural o artificial y por ejemplo: una ducha o piscina.
Terreno, suelo y luz

El mejor emplazamiento para tu huerto si tienes jardín es esa parte bien soleada, aireada y drenada. Tan malo es que no reciba nunca los rayos del sol como que sufra de una insolación. Por eso, se suele recomendar orientaciones sur y suroeste. El suelo debe ser mullido y fresco. Apuesta por árboles frutales como naranjas, limoneros o higueras si tienes espacio y además de sus frutos os regalarán una sombra formidable.
¿Y tú, tienes un huerto en casa? ¿Estás pensando en instalar uno en el jardín o lo tuyo son las los huertos urbanos? Cuéntanos qué opinas...
hace 3 años
Tengo huerto acondicionado 24 m2. pero no tengo semillas.
hace 3 años
Muy interesante el artículo me ha proporcionado buenas ideas