El aislante térmico y acústico son algunas de las características más importantes que debemos de analizar y tener en cuenta en el hogar.
En este artículo
Es muy importante que revisemos este aspecto ya que de lo contrario, podríamos perder confort. Por ejemplo, en el aspecto térmico, tendríamos una gran cantidad de fugas que provocarían que nuestra casa estuviera continuamente fría, a pesar de que los sistemas de calefacción los tuviéramos a toda potencia. Por otra parte, si permitimos que una gran cantidad de ruido llegue a penetrar en el interior del hogar, podría desencadenar cefaleas y estrés entre las personas que habiten en su interior. De esta forma, si conseguimos paliar ambos problemas, lograremos tener una casa mucho más confortable.
¿Cómo podemos conseguirlo? Como ya hemos visto en otros posts, hay una gran cantidad de materiales que pueden realizar la función de aislante térmico y acústico, pero en este consejo, nos centraremos en un tipo de material natural y ecológico, la lana de vidrio.
¿Qué es la lana de vidrio?
Se trata de un producto compuesto por un entrelazado de filamentos de vidrio aglutinados mediante una resina ignífuga. Debido a estas características básicas, podemos afirmar que se trata de un producto que contiene una gran capacidad de aislamiento térmico y acústico y plena garantía de seguridad frente a posibles incendios. Gracias a su composición, la lana de vidrio lo podemos emplear en distintos tipos de edificación.
Características de la lana de vidrio
- Cuando decimos que se trata de un muy buen aislante térmico es porque la porosidad del material evita que la temperatura del exterior no penetre en el interior del hogar por convección, radiación y conducción.
- Las ondas del sonido se quedan atrapadas entre los filamentos del tejido evitando que llegue al interior del hogar. Todo esto gracias a la rigidez y la resistividad al flujo del aire.
- La lana mineral cabe decir que se trata de un material hidrófugo y no capilar, es decir, no capta ni transmite la humedad por el interior de sus poros.
- Por último, como ya hemos nombrado anteriormente, se trata de un tipo de material que repela el fuego.
- Suprimir los puentes térmicos, es decir, todos aquellas zonas del hogar que más pérdidas climatológicas contienen.
- Menor consumo energético. Al mantener de forma más eficiente la temperatura no hará falta que empleemos tanto los sistemas de calefacción o aires acondicionados.
- Aumentaremos el confort de nuestra casa, no solo gracias a una óptima temperatura sino que también a la eliminación del ruido.
- Al haber menos ruido desaparecerán síntomas de estrés, insomnio y cefaleas.
Como podemos observar, la lana de vidrio, además de caracterizarse por ser un producto natural, cumple la función de aislamiento a la perfección.