El baño es el espacio de la casa que normalmente dispone de menos luz y, a veces injustificadamente, es relegado a un segundo plano por su tamaño. Deberíamos más bien preocuparnos por aumentar su espacio, al menos de modo visual, y hacer que sea más luminoso.
Puede que tu baño ni siquiera disponga de entrada de luz natural por no tener ventanas. ¿Cómo podemos sacarle partido entonces? Veremos algunos trucos para hacer que tu baño resulte más luminoso.
En este artículo
- Textiles claros para ayudar a la luminosidad
- Multiplica la luz con espejos
- Mamparas de vidrio para que la luz llegue a cada rincón
- Juega con las luces (Led, por supuesto)
- Puerta del baño que deje pasar la luz, ¿por qué no?
- Apuesta todo al blanco para ganar luminosidad
- Divide para ganar luminosidad
- Sanitarios suspendidos para ganar luminosidad
Textiles claros para ayudar a la luminosidad
¿Cómo puedes ayudar a dar luminosidad al baño con un recurso fácil y rápido? Los textiles del baño, ya sean alfombrillas, toallas o cortinas pueden ayudar más de lo que crees. Opta por tonos suaves y lisos, sin estampados que recarguen. El blanco puede ser tu gran aliado y, en su defecto, el beige, gris claro o los tonos tierra.
Multiplica la luz con espejos
El recurso de los espejos colocados de manera estratégica es perfecto para que tu baño gane en luminosidad. Reproducen el espacio colindante y generan sensación de amplitud y, si puedes colocarlo cerca de una ventana para que refleje la luz, tu baño se llenará de luz. Los espejos reflejan la luz, que rebota en ellos y se multiplica. En el baño es especialmente fácil usar este recurso ya que los espejos son elementos que se usan siempre. Solo hay que saber en qué posición es la mejor para conseguir el mejor resultado.
Mamparas de vidrio para que la luz llegue a cada rincón
Si tienes la suerte de que tu baño tenga una ventana, aunque sea pequeña, hay que intentar que su luz llegue a todos los rincones del baño. Las mamparas de cristal serán en ese caso tus mejores aliadas. ¡Olvida la timidez y apuesta por el transparente! Si eliges cristal transparente y minimizas los perfiles el éxito está asegurado.
Juega con las luces (Led, por supuesto)
Cuando no hay luz natural en el baño, por desgracia en muchas ocasiones, las luces Led, por su tamaño, nos permiten integrar luz donde antes no era posible. Apuesta además por la iluminación con Led porque ayuda a un importante ahorro en tu factura y a que tu casa sea más sostenible. Ya que necesitas poner luces, ¿por qué no juegas con ellas? ¿Qué tal si pruebas con la luz indirecta? Se trata de crear un baño lo suficientemente iluminado pero sin mostrar la fuente de luz artificial. ¿Cómo? Para ello se colocan las luminarias en sitios estratégicos como debajo de las molduras del techo. Tampoco te cortes y usa lámparas colgantes que hasta ahora parecían estar fuera de lugares húmedos. Con la instalación correcta y las lámparas bien escogidas, todo es posible.
Puerta del baño que deje pasar la luz, ¿por qué no?
Si tu baño, por su disposición, ha quedado relegado a la parte de la casa sin ventanas y si no te quieres meter a una reforma integral para cambiarlo de sitio, una solución perfecta puede ser cambiar la puerta y ponerla de vidrio (traslúcido, por la privacidad). De ese modo la luz llegará a tu baño y, aunque no sea suficiente, ayudará a dar sensación de mayor luminosidad. Escoge un modelo sin marco para que la llegada de luz sea mayor.
Apuesta todo al blanco para ganar luminosidad
La elección del color del baño es clave para mejorar la sensación de luminosidad, tanto si tiene luz natural como si no. El blanco en las paredes y pavimentos es una de las mejores elecciones para dar luz a cada rincón porque permite que el baño se vea más claro y que la luz existente rebote. Si además los muebles son blancos aun mejor, por supuesto. Aunque, como sabemos, el blanco no es el color ideal para crear un espacio cálido y acogedor. Si tu temor es que acabe siendo un espacio un tanto “frío”, combinarlo con un gris claro es genial para resaltar la luz pero que sea un baño confortable.
Divide para ganar luminosidad
El baño está dividido en tres zonas: la bañera en la zona del dormitorio, el inodoro, pensado para usarse desde la zona de noche y día, es decir, por el dueño y posibles visitas y, separado, el lavamanos, que actúa de espacio recibidor. Menos la zona de inodoro, el resto disfrutan de mucha luz natural. Bien de modo natural, al estar abiertas al espacio (lavamanos) o bien mediante el uso de paredes y puertas de vidrio traslúcido (ducha).
Sanitarios suspendidos para ganar luminosidad
Los sanitarios y muebles suspendidos son perfectos para ganar luminosidad en tu baño. La luz no encontrará obstáculos para circular. El baño parece más ligero y resulta más fácil de limpiar. ¡Todo ventajas!
¿Qué os han parecido estas ideas? ¡Llena de luz tu baño!