Ahora que el calor ya aprieta, es tiempo de exteriores. Porches, jardines, balcones o azoteas, todos necesitamos salir a respirar y disfrutar del gusto de estar ¡a la fresca! Hoy os hemos preparado una selección de 7 salones de exterior que invitan a vivir fuera. Hay diseños modernos, otros más clásicos, ibicencos, mediterráneos o urbanos. Poneos cómodos: ¡hay para todos los gustos y bolsillos!
En este artículo
- El porche de toda la vida
- Igual que el de dentro, pero ¡sin muros!
- Conectando dentro y fuera
- Reducido al mínimo
- Con cortinas de cristal
- A lo grande
- Para todo el año
El porche de toda la vida

Tiene el estilo de los porches clásicos, pero también un aire algo ecléctico. Un porche de obra que destaca por su colorido, por ese adorno floral del techo, por esa vieja puerta reconvertida en mesa de centro y ese suelo que, sin duda, aguantará el veraneo de varias generaciones.
Igual que el de dentro, pero ¡sin muros!

Algo clásico, algo rústico. Este porche es el rey de esta casa. Aquí se puede descansar, ver la TV, leer o simplemente disfrutar de las vistas. Un cómodo sofá, una gran mesa, un suelo de madera y una alfombra dan calidez al espacio. ¿Quién quiere vivir dentro, teniendo este salón tan perfecto fuera?
Conectando dentro y fuera

En esta casa se inventaron un salón para todo el año eliminando muros. En lugar de usar un cerramiento común, instalaron unas puertas correderas de cristal que, una vez abiertas, comunican ambos salones (el interior y el exterior). Para el suelo, losetas vinílicas (súpercálidas y resistentes) y un toldo para resguardarse del sol. Fíjate en la original mesa y en la nevera para gaurdar las bebidas frescas Con un rincón así en casa ya no echaríamos tanto de menos las vacaciones.
Reducido al mínimo

Los que no tenemos la gran suerte de tener un porche o terraza también podemos disfrutar de un salón exterior, si aprendemos a sacar jugo a un pequeño balcón. Por ejemplo, cubriendo el suelo con losetas de madera o de composite ,añadiendo vegetación a las paredes o usando muebles plegables, que podemos sacar ahora y guardar en invierno. Cojines, pufs, alguna hamaca (si cabe). Cosas de tamaño mini, que sumen confort. Recuerda dejar instalados apliques o plafones para cuando llegue la noche y necesites luz. A nosotros nos encantan las soluciones solares que se cargan por el día y nos dan luz ¡gratis! por la noche.
Con cortinas de cristal

Se está tan a gusto en la terracita o el porche en verano que muchos no dudan en sumarlos al propio salón para disfrutarlos todo el año. Si usáis un cerramiento como el de la fotografía, tendréis ventilación en verano y luz en invierno. El truco para que no quede "pegote" es usar un cristal sin apenas perfiles. Si te preocupa la intimidad, puedes instalar cortinas o estores. Recuerda que el suelo debe de ser resistente al agua (madera tropical, composite o cerámica), por si un día se queda abierto y cae una tormenta de verano.
A lo grande

Si tu terraza es la joya de tu casa, entonces tienes que mimarla para convertirla en tu refugio exterior. En ella puedes relajarte, dormir o hasta comer. Lo ideal es que tu salón exterior cuente con distintas zonas para aprovechar mejor el espacio. Elige un lugar con sombra donde colocar el comedor (una mesa robusta, una iluminación correcta). Crea también una zona para el descanso con muebles de exterior, sofás, etc. En la foto podéis ver cómo han cubierto todo parte del suelo con césped artificial y ha decorado con grandes maceteros.
Para todo el año

Se podría decir que este porche es el clásico de las grandes residencias de verano. No podemos dejar de mirar sus techos cubiertos de cañizo, sus muebles y lámapras de mimbre o sus suelos de piedra. Aquí hay espacio para sofás, una mesa para comer en familia y hasta un par de chaise longues. ¡Para quedarnos a vivir allí!
hace 6 años
Creo que el mayor problema es el tema de los materiales, que fuera no aguantan todos y al final se ponen feos.