6 revestimientos de paredes para actualizar tu salón

Las molduras son elementos ornamentales clásicos. No obstante, pueden ser bastante espectaculares si los mezclamos con entornos más modernos. Puedes decorar las paredes de tu salón con cuarterones de escayola. Pero, además, también puedes pintar esas paredes y alejarte del blanco, para darle un toque más actual. El resultado, como podemos apreciar, es de lo más elegante.

El papel pintado es y seguirá siendo una de las opciones más económicas para actualizar las paredes de una vivienda. También las del salón. Lo mejor de todo es que hay un montón de modelos. Estampados con flores, lisos, con motivos geométricos o aquellos que imitan materiales como la madera y el ladrillo.

Ante todo, escoge modelos que sean fáciles de montar. Los estampados pequeños son más complicados, pues tienen que encajar a la perfección. Si te enamoras de uno de estos diseños, lo mejor es que lo coloque un profesional.

Una pared con un revestimiento porcelánico puede dar también un toque diferente al salón. Lo mejor de todo es que en este campo tienes infinitas posibilidades: desde azulejos que imitan los dibujos geométricos de los hidráulicos hasta las últimas novedades con porcelánicos con relieve. Muy interesante son los revestimientos estriados, que añaden profundidad a las paredes. Ante todo, recuerda no recargar las estancias. Una pared puede ser más que suficiente.

Se pueden conseguir verdaderas maravillas con simples planchas de DM de diferentes grosores. Puedes ir pegándolas creando diferentes volúmenes decorativos. Para que quede perfecto, traza la idea en un papel. Ve dibujando los diferentes niveles y grosores para cortar los tableros con las medidas exactas. Después tan sólo hay que fijarlos con un adhesivo de montaje extra fuerte. Para rematar, un poco de pintura y listo.

Quizá sea un efecto demasiado llamativo para todas las paredes del salón. Si decides hacer algo similar, céntrate siempre en una, para que la estancia no termine saturando visualmente.

El corcho es uno de esos materiales que vuelve con fuerza. Lo hemos visto en infinidad de ambientes de revista, y nos gusta. Las paredes de corcho son decorativas, y tienen un punto natural muy carismático. Es una solución única y muy práctica, pues estas placas de corcho mejoran el microclima del interior. El corcho, además, logra reducir considerablemente el ruido y hace que las paredes sean más cálidas, por lo que es estupendo en zonas frías.

Si crees que es una solución poco duradera, te equivocas. El corcho es resistente y dura bastante tiempo. Puedes instalarlos en zonas como el salón, creando así un rincón mucho más acogedor.

Otro gran clásico que nunca pasa de moda. La madera es el material más cálido que encontrarás para tus paredes. Si bien es cierto que, en sus tonos naturales, confiere un aspecto rústico y acogedor casi al instante, puedes pintar esa madera en diferentes colores para darle otro toque. Por ejemplo, la madera pintada en blanco hará más amplias las estancias, siendo muy interesante en los ambientes de estilo Mediterráneo.

Si además cuentas en el salón con vigas de madera, el efecto aumentará considerablemente. Si decides pintar, pinta también estas vigas para completar el conjunto.