6 formas de organizar una cocina sin armarios

Igual que en los mejores restaurantes, llena tu cocina de rieles en los que puedes ir dejando las cosas que quieres a mano. Lo ideal es que sea de acero inoxidable porque será muy fácil de limpiar y duradero, aunque hay combinaciones muy estéticas también de forja o madera. Allí podrás acoplar ganchos, escurreplatos, portacuchillos magnéticos, recipientes o hasta tablas de cortar. En una pared de algo más de un metro puedes inventar una composición como la de la fotografía en la que hay sitio para un módulo adicional, unos cajones en el suelo, y hasta una pizarra en la que ir dejando recaditos. En esta pequeña cocina hay sitio incluso para un pequeño huerto vertical y una cocinita "de mentiras" para que los niños vayan cogiendo soltura. 

Si no tienes una gran despensa, ¡invéntala con una estantería! Aprovecha la parte más baja para poner las cosas que más pesan (el agua, la leche) dándole así más consistencia. Y organiza la superior de la forma que más práctica te resulte. Algunos ordenan los alimentos por categorías (por ejemplo, todo lo que necesitas en el desayuno junto), otros prefieren usar un sistema de tarros, cestas o botes de cristal o cajas, para agrupar los alimentos por tamaños o usos. Aprovecha tus paredes con estanterías o convierte un hueco en una hornacina abierta. Eso liberará tu encimera y te dejará más espacio para moverte y trabajar cómodamente. 

¿Por qué no? El techo también es un buen lugar en el que guardar todo lo que no quepa en los pocos armarios que tienes o en las paredes. Puedes usar un sistema de ganchos, rieles o incluso atreverte a poner un carrusel de coladores, sartenes y ollas. Lo ideal, especialmente si no tienes una talla alta y no quieres estar todo el día subido en un taburete o escalerilla, es que las cosas que más uses se queden en estantes más bajos y las que menos arriba. Combinando todo tipo de estantes en paredes y techo, esta cocina tiene poco que envidiar a la de los mejores Chefs. La culpa la tienen, un poco, el espectacular grifo con rociador, la gran encimera de gas, o el precioso suelo de, ¿madera? Mucho me temo que una cocina tan práctica se viste por los pies con vinilo (igual de bonito que la madera, pero mucho más fácil de mantener y limpiar). 

Los carritos multiusos o las cestas con ruedas son quizás uno de los recursos más polivalentes que existen. En ellos podrás guardar el menaje o incluso alimentos en tarros, frutas o verduras frescas. Además del clásico carro, también hay mesas, o consolas con cajones que pueden servir además de para guardar, como improvisado punto de apoyo o barra de desayunos. Lo malo de este sistema de almacenaje es que si no eres demasiado cuidadoso con el orden, y tienes muchos trastos, puede ser difícil de mantener en condiciones. Pero mientras llegan esos armarios que anhelas, te harán un buen papel. 

Así que ya lo sabes, soluciones hay muchas, solo tienes que agudizar tu ingenio y sacar partido de los trucos que te hemos contado para hacer más cómoda y práctica tu cocina. 

¿Y tú, estás pensando en completar la capacidad de almacenaje de tu cocina sin armarios? ¿Qué sistema te cuadra más? Esperamos que nos lo cuentes en los comentarios.