¿Quieres que tu salón luzca un aire más contemporáneo y personal? ¿Te apetece algo más moderno, conservando al mismo tiempo esa esencia que tienen esos salones sobrios y acogedores, ajenos a las modas? Estas son las 5 claves que debes seguir para lograrlo. ¡Toma nota y atrévete a adaptarlas a tu gusto!
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1. Buena base
Para conseguir un estilo atemporal en el salón (y en cualquier otra estancia de tu casa) mira en primer lugar a las paredes. Pintándolas de blanco tendrás la base perfecta sobre la que trabajar la decoración posterior. Por mucho que te tienten los tonos de moda, evita siempre los colores demasiado intensos o chillones. Es mejor apostar por los neutros. A tiempo estarás después de aplicar color en alguna pared de contraste, añadir unas molduras decorativas, papeles pintados...
Los mismos tonos claros deberían usarse en las tapicerías. El sofá por ejemplo, al ser la pieza más grande del salón, podría ser blanco si necesitas luz, beige si quieres conseguir un ambiente acogedor, y gris claro u oscuro, dependiendo de si buscas modernidad o un extra de elegancia. ¿Y no quedará muy soso? ¡Para nada! Escoge en los complementos colores naturales como los piedras, blancos arenas o tostados para que luzca siempre atractivo e inmutable.
2. La madera nunca falla
Algunos materiales como la madera viven una eterna juventud. Si quieres hacer una apuesta segura invierte en un buen suelo de madera. Ya no se llevan los colores oscuros, ni las maderas más nobles. En su lugar, los tonos claros suman luz manteniendo ese ambiente cálido que buscamos.
Además del parquet de toda la vida (de roble, haya...), tienes la opción de usar materiales que la imitan bien sin pedirnos tantos cuidados (cerámicos, vinílicos...). Consulta con un especialista antes de decidirte, no todos tienen las mismas garantías, ni son aptos para por ejemplo, poner una calefacción radiante. ¿Y algún material más se salva de la jubilación forzosa? La piedra o el mármol. No son baratos, pero siempre consiguen que una casa se vea estilosa a pesar de los años.
3. Mezclas que funcionan
No hay que confundirse, atemporal no significa plano, soso ni aburrido. Un salón clásico nos da mucho juego para hacer mezclas atrevidas que pongan en un mismo plano nuevo y viejo. Fíjate en la arquitectura de la casa y ponla en valor. Saca a relucir antiguas vigas de madera, la bóveda catalana, una pared de piedra original, o los suelos hidráulicos. Un incómodo retranqueo en la pared nos puede servir para instalar una librería a medida de pladur que aproveche mejor el espacio.
Lo clásico es siempre atemporal. Pasa con las molduras de madera, los sofás de piel, las tapicerías tipo capitoné... Si lo ves muy serio, puedes añadir después detalles más modernos que pongan el contrapunto para que se vea más fresco. Por ejemplo, con luminarias de diseño y modernas o muebles de fibras naturales.
4. Buena luz
Es básica en salones de todos los estilos. Más incluso cuando lo que buscamos es un aire contemporáneo y sofisticado. Fíjate en la entrada de luz natural y planifica una distribución en la que ningún mueble, o muro, suponga un obstáculo. Los fijos y puertas de cristal pueden ser perfectos aliados para conseguirlo.
¿Y las cortinas? Lo mejor es que apuestes por telas naturales y con mucha caída (si arrastran un poquito se verán más elegantes). Para las puertas (del salón y el resto de la casa como es lógico) la madera siempre nos deja un sabor muy rústico. En cambio, las puertas lacadas y con cuarterones tienen ese puntito clásico que no envejece.
5. Prioriza el orden
Si la arquitectura del espacio, los colores y textiles son importantes, también lo es el orden. Por muy contemporáneo que vistamos el salón si luego se ve muy atiborrado de muebles, de poco servirá el esfuerzo. Es fundamental no cargar el espacio, y sobre todo, aplicar soluciones para guardar que nos lo pongan muy fácil. En lugar de 3 muebles cargados de trastos, uno solo a medida y bien planificado para que entre la TV, todos tus libros, ese radiador que molesta, o incluso un aparato de aire acondicionado.
La elegancia se mueve y se siente cómoda también con la tecnología más moderna. La domótica ofrece además de ahorro energético un confort que agradecerás siempre. Con ella podrás planificar la iluminación perfecta para cenar en familia, recibir visitas, trabajar... Y todo con la comodidad de manejarlo con un botón o incluso desde tu teléfono móvil.
¿Y tú, cómo has decorado tu salón? ¿Te gusta este rollo un poco más clásico y atemporal? Déjanos saber qué opinas dejando un comentario.
hace 3 años
Tengo un salón .. con muchísimas posibilidades de ser un gran Salon, cómo a mi me gustaría, el problema es que siempre sale algo que no me deja arreglarlo, haber si de una vez lo consigo, por eso soy una fanática vuestra, me encanta todo lo que ponéis, con tanto gusto!!!!