Un apartamento nórdico e histórico en el centro de Palma

Doce apartamentos de lujo encerrados en un edificio antiguo de 400 años que dan a un increíble patio con piscina y salón en el jardín. Las capas sobre capas de varias vidas, actividades, estilos, funciones, materiales y destinos se han moldeado juntas a lo largo de cientos de años. Cada apartamento es único, presenta soluciones arquitectónicas peculiares donde el espíritu de la ciudad vieja se preserva celosamente y se mejora mediante la yuxtaposición de soluciones de diseño modernas e inflexibles. Los diseñadores combinaron el funcionalismo escandinavo con el minimalismo contemporáneo, siempre respetando el carácter histórico y el alma del edificio. El resultado es una atmósfera dinámica con espacios que incorporan muebles elegantes y materiales de calidad. 

Cada vivienda cuenta con parquet de roble instalado a punta Hungría, molduras decorativas, texturas matericas, paredes neutras, chimenea de mármol y detalles de contrastes se combinan en un ambiente cálido y acogedor. Los techos altos con vigas vistas renovadas resaltan la identidad histórica del edificio, para dotar al espacio de carácter y personalidad, mientras que varias paredes con paneles mejoran aún más los interiores con su sofisticado diseño vanguardista, como regla general, detalles y materiales cuidadosamente seleccionados. 

Las áreas de la cocina y la sala de estar se mezclan en un espacio abierto contemporáneo que vive con grandes ventanales que dan al jardín y la piscina del patio interior. La cocina de estilo moderno y minimalista. Las puertas de armario lisas en tono gris con tirador integrado se une a una sobria isla de acero inoxidable equipada con electrodomésticos de primera calidad. Suspendida entre el pasado y el presente, resalta el contraste entre la historia y el diseño de vanguardia. 

Todas las habitaciones tienen un espacio optimizado y riman con la estética de todo el apartamento, con una mezcla de madera y colores atenuados. Los dos dormitorios con los que cuenta la vivienda más grande, de 178 m2, igualmente en tonos neutros, son de corte moderno y sofisticado, inspirados en el más lujoso estilo nórdico. Ambos son amplios y luminosos y cuentan con un gran espacio funcional de almacenaje gracias a su sistema de armarios altos, con perfiles detallados que realzan la singularidad de toda la habitación. 

En el exterior, dos terrazas y un patio interior crean un acogedor oasis con piscina, jardín y muebles de exterior de diseño para poder tumbarse y relajarse a la altura de las circunstancias. El punto de partida obvio fue la pieza central: desvelar y recuperar el patio, creando un jardín secreto para que todos los residentes disfruten.La luz, el alma y el ambiente de la ciudad se convierten en parte de la residencia y el espacio de la terraza es la extensión perfecta de la sala de estar, con el sol de la mañana, tardes a la sombra y cenas al atardecer. El hierro forjado original de las barandillas y las ventanas con cuarterones de vidrio se han replicado para mantener la esencia del edificio.