¿Sabes para qué sirve la instalación de toma de tierra en la red eléctrica de tu casa? Descubre cómo identificarla y por qué es fundamental para la seguridad.
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Normalmente la conocemos como “toma de tierra”. Pero esta instalación, obligatoria por normativa , también se denomina puesta a tierra o conexión a tierra. Su nombre es muy descriptivo: es un sistema cuya función es desviar la corriente eléctrica hacia el terreno para evitar accidentes o averías. Todos los edificios conectados a la red deben llevar toma de tierra, aunque a día de hoy todavía hay viviendas antiguas en las que el cableado no la incluye. Si quieres saber si la tuya la tiene, qué beneficios presenta y cómo identificarla en enchufes y clavijas, sigue leyendo: te lo contamos.
Qué es y para qué sirve la toma de tierra
La toma de tierra es un conductor presente en el cableado de los edificios. Este conductor conecta todas las tomas de corriente (los enchufes de las paredes) a una pica enterrada en el subsuelo, cerca del edificio. El propósito de esta instalación es derivar cualquier fuga de corriente eléctrica desde la toma afectada hasta la tierra, evitando electrocuciones, cortocircuitos o averías en la red. Aunque este sistema es obligatorio en España desde 1973, muchas viviendas de la época no la incluían; de ahí los famosos "calambres" que a veces provocaban los enchufes, interruptores y aparatos eléctricos.
La normativa que establece la obligatoriedad de la toma de tierra y sus características aparece reflejada en el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT), en el Documento ITC-BT-18 sobre Instalaciones de Puesta a Tierra. En el reglamento se describe perfectamente su función: "Mediante la instalación de puesta a tierra se deberá conseguir que en el conjunto de instalaciones, edificios y superficie próxima del terreno no aparezcan diferencias de potencial peligrosas y que, al mismo tiempo, permita el paso a tierra de las corrientes de defecto o las de las de descarga de origen atmosférico". Con estas últimas se refiere a los rayos producidos por las tormentas eléctricas, que también son conducidos a tierra si acceden a la red eléctrica.
Cómo saber si un enchufe tiene toma de tierra
Cuando hablamos de "enchufes", en general nos referimos a dos tipos de dispositivos:
- Las tomas de corriente instaladas en la pared y a las que conectamos los aparatos eléctricos.
- Las clavijas que se colocan en el extremo de los cables eléctricos para alimentar a los aparatos.
En las tomas de corriente o enchufes de pared, la toma de tierra es obligatoria. ¿Cómo saber si las de nuestra casa la tienen? Muy sencillo. Fíjate en la foto, arriba: verás que en la parte superior e inferior de la toma hay dos pequeñas pestañas metálicas. Estas pestañas están conectadas al conductor que finaliza en la pica de metal que conduce la electricidad al terreno. Si las tomas de tu vivienda, por el contrario, están enrasadas con la superficie y no tienen pestañas, tendrás que renovar la instalación.
En caso de las clavijas (enchufes a secas) es diferente. La instalación eléctrica de la vivienda, normalmente de tipo monofásico, debe llevar tres cables o conductores: azul (neutro), marrón o negro (fase) y verde-amarillo (tierra). Es recomendable que todos los aparatos eléctricos de la vivienda lleven enchufes con toma de tierra, pero en algunos no es obligatorio: por ejemplo, en lámparas y cargadores para dispositivos móviles. Si desmontas un enchufe de este tipo, encontrarás solo el cable azul y el negro/marrón. Por el contrario, los que llevan los electrodomésticos y los aparatos más potentes (tostadoras, televisores, microondas...) incluyen los tres conductores. Son más aparatosos y grandes que los otros, como puedes ver en la foto superior.
El símbolo de la toma de tierra aparece impreso en el embalaje de muchos aparatos eléctricos que incluyen este cable en sus enchufes. También lo podemos ver en las clavijas de conexión de algunos sistemas eléctricos, indicando dónde se debe conectar el cable amarillo/verde durante el montaje. Consiste dos líneas perpendiculares (similares a una T puesta del revés) situadas sobre dos paralelas. Normalmente, este símbolo se representa dentro de un círculo o un triángulo.
La toma de tierra nos mantiene a salvo de accidentes y protege nuestra instalación de sobrecargas o cortocircuitos. Si tu instalación eléctrica es antigua, consulta a un profesional para renovarla cuando antes: es fundamental para tu seguridad.
Si no te aclaras, siempre puedes aprender sobre el color de los cables eléctricos para evitar confusiones y malas conexiones.
