La pintura epoxi ha evolucionado durante los últimos años y ya es posible integrarla en la decoración. Permite renovar suelos, encimeras y muebles en poco tiempo y conseguir efectos vanguardistas, resistentes y actuales. ¡Descúbrela!
En este artículo
Cuando hablamos de “pintura epoxi” nos suelen venir a la mente suelos de garajes, de pistas deportivas o de naves industriales. Es cierto que, en origen, este tipo de pinturas solo se empleaban fuera del ámbito doméstico. Pero hoy las cosas han cambiado, y como sucede con tantos otros productos y materiales industriales, actualmente la pintura de resina epoxi también se emplea para revestir distintas superficies en las viviendas. Es un producto con muchísimas ventajas que permite lograr ambientes contemporáneos y especiales, lejos de la decoración de toda la vida. Hoy te contamos en qué consiste, cómo se utiliza y cuál es la mejor manera de integrarla en la decoración.
¿Qué es la pintura epoxi?
La pintura epoxi (o pintura epóxica) se produce a partir de la resina del mismo nombre. Esta resina es un polímero o material plástico que se endurece cuando se mezcla con otro componente, llamado catalizador. Por lo tanto, lo habitual es que estas pinturas se presenten en dos envases: uno más grande con la pintura en sí y otro más pequeño con el catalizador. Es muy importante mezclarlos en las dosis correctas, así como utilizar la pintura ya mezclada siempre dentro del tiempo indicado por el fabricante.
Las características generales de las pinturas epoxi son:
- Resistencia y dureza. Estas pinturas son mucho más resistentes que las acrílicas, las sintéticas e incluso las que están formuladas con poliuretano. Al mezclarse, el catalizador inicia en la resina un proceso de endurecimiento químico que da lugar a un revestimiento sólido y compacto. Tampoco les afectan los productos químicos.
- Impermeabilidad. Las resinas y pinturas epoxi son totalmente impermeables y estancas al agua. Esto hace que se puedan emplear incluso en superficies sumergidas como cisternas o piscinas.
- Aspecto uniforme. Estas pinturas hacen posible conseguir superficies sin juntas y con un color regular.
Cuándo utilizar la pintura epoxi en decoración
Las características antes señaladas hacen que estas pinturas sean perfectas para renovar superficies con mucho desgaste. Por ejemplo, utilizar pintura epoxi en suelos es una excelente idea. Desde hace años, esta práctica es habitual en garajes o ámbitos industriales y comerciales; pero la gama de colores y acabados de este tipo de pinturas ha crecido mucho en los últimos tiempos, lo que permite adaptar los revestimientos al estilo del hogar. Para pintar un suelo con una pintura epoxi es importante que esté totalmente liso y en buen estado, sin grietas ni fisuras. No es una buena elección para pintar suelos de madera; en su lugar, es mejor elegir pinturas acrílicas especiales. Por el contrario, sí es posible pintar suelos de hormigón, baldosas cerámicas (bien colocadas y con las juntas en perfecto estado), terrazo, etc.
¿Es posible pintar una encimera con pintura epoxi? No solo es posible, sino que es una excelente idea. La resina crea una superficie gruesa y lisa que aguanta bien las limpiezas diarias, el calor, la humedad… Hay que aplicar dos o tres manos siguiendo al detalle las instrucciones y respetando los tiempos de secado.
Cómo aplicar la pintura epoxi
Estas pinturas suelen ser de uso profesional, aunque cada vez hay más opciones para aquellas personas que se animen a renovar su casa. Antes de tomar la decisión de utilizarlas, ten en cuenta estas precauciones:
- Trabaja en ambientes ventilados y usa mascarilla, gafas, ropa de trabajo y guantes.
- Si no vas a utilizar toda la pintura, emplea un medidor para calcular las proporciones de pintura y de catalizador. La cantidad que mezcles la tendrás que utilizar durante un plazo de tiempo concreto; después, se endurecerá y quedará inservible.
- Aplícala con rodillos y brochas de calidad. Límpialos con el disolvente adecuado antes de que la pintura fragüe.
- Coloca cinta de carrocero, papel y plástico en las zonas limítrofes al área a pintar.
- Espera el tiempo indicado en el envase antes de pisar o tocar la zona pintada.
¿Ya te has decidido? Entonces, ¡manos a la obra! Tras proteger la zona, mezcla la cantidad de pintura que vayas a emplear. Si vas a utilizarla toda, vierte el catalizador en el recipiente de pintura y remueve hasta que la mezcla quede homogénea. Extiende la pintura con el rodillo y usa la brocha para pintar las zonas donde este no llegue. Deja secar y aplica otra mano; si quieres una cubrición mayor o más resistencia, da una o dos manos más.
La pintura epoxi es un producto con muchas ventajas, pero no es fácil de manejar. Si no estás seguro, confía en los profesionales para obtener el mejor resultado: merece la pena.