Nadie duda de las ventajas de un mueble a medida: exprimen el espacio al máximo, se adaptan por completo al estilo de tu casa y además, son fantásticos para conseguir más orden en casa. Si has tomado la decisión de invertir en ellos, pero te asaltan dudas sobre su tamaño, materiales, acabados... echa un vistazo a esta lista de cosas en las que fijarse, para conseguir un mueble perfecto con el que sacarle el máximo partido a tu casa.
En este artículo
- El estilo
- Las medidas
- Su función
- Materiales
- Personalización de su interior
- Un plus de ergonomía
- Los tiempos de fabricación
- El precio
El estilo
La gran ventaja de un mueble hecho a la carta es que se puede adaptar por completo al espacio disponible. Será una pieza única que encajará a la perfección en ese hueco. Por eso es importante tener en cuenta cuestiones como su material, color o textura, adaptados 100% a tu gusto y a la estancia en la que se va a instalar. En un baño, por ejemplo, nos puede interesar un mueble de poco fondo volado para que se vea más ligero y con un acabado semibrillante para que proyecte la luz; en un salón, quizás buscamos una pieza más robusta y de líneas rectas, que ponga el punto exquisito. Armarios, librerías, estantes volados a medida y sofás (sí, sofás también) son los proyectos más demandados.
Las medidas
Para que el resultado sea el esperado hay que tener en cuenta el lugar que va a ocupar el mueble, las medidas, el presupuesto disponible, y las pautas estéticas que debe seguir para adaptarse al hueco. Imagina que quieres aprovechar un retranqueo de la pared, ocultar instalaciones, integrar dentro una puerta corredera, armarios en una habitación de formas imposibles, hacer un mueble separador entre dos estancias con un hueco para una puerta o una zona de paso... Todos estos datos serán necesarios para que el arquitecto o el interiorista pueda hacer un presupuesto personalizado del diseño, y el carpintero o albañil de la ejecución del mismo.
Su función
Cubrir un hueco entre dos columnas o un espacio inútil debajo de una escalera son soluciones que siempre ofrece un mueble a medida, pero se le puede pedir mucho más. Personalizar un diseño a la carta nos da mucho margen para exprimir toda su capacidad de almacenaje, con soluciones que pueden combinar funcionalidad y estética. Te pongo un ejemplo: imagina que tienes que guardar muchos libros. Puedes encargar una gran librería de pladur para el salón y disfrutar de la belleza de una pieza de grandes dimensiones donde los protagonistas sean los libros; o bien cubrir esta misma librería con un paneles correderos, del mismo color de la pared, para que se fundan con ella.
Materiales
Poder elegir la materia prima, el color, grosor y acabado de tu mueble a medida es otro de sus puntos fuertes. Hay una carta inmensa de materiales y acabados disponibles para conseguir el mueble ideal. Los más demandados son los de madera realizados con tablero de DM en acabado pintado o lacado, también se pueden hacer de pladur, Corian, acero inoxidable... Se pueden rematar con vidrio o cristal, encimeras de madera o mármol en los baños... Hay tantas posibilidades como proyectos imagines.
Personalización de su interior
Además de poder adaptarse a toda la altura disponible, y poder elegir material, acabados, tiradores o puertas, y de ser capaz de resolver una esquina imposible o salvar vigas, columnas, radiadores o cualquier cosa que quede integrada dentro, su interior también puede personalizarse para adaptarse por completo a la función para la que se va a utilizar. Para acertar, piensa primero en qué vas a guardar dentro de ese mueble a medida (vestidos largos, zapatos, maletas, menaje de mesa...) y ponte a trabajar mano a mano junto al arquitecto en su diseño.
Un plus de ergonomía
Tenemos claro que el mueble a medida va a encajar perfectamente en el hueco disponible con un diseño impecable, pero falta algo básico: añadir un plus de ergonomía para que podamos acceder fácilmente a las cosas que guardemos dentro de este mueble. En el caso de los armarios se ve muy bien el ejemplo. No diseñes un vestidor a medida en el que necesites un taburete para acceder a ropa que usas a diario. Lo mismo con esas librerías infinitas a las que no se les añade en el mismo diseño una escalera. Solo un mueble que se adapte 100% a ti y a tus necesidades de almacenaje será perfecto para ti.
Los tiempos de fabricación
Precisamente por todas las ventajas de personalización que admite este tipo de mobiliario hay que contar con unos tiempos o plazos de fabricación. Dependiendo de la complejidad del diseño (interior y exterior) y de las particularidades que exige su instalación en casa, los plazos pueden variar. No es lo mismo hacer unos estantes de pladur entre dos pilares, que un mueble largo en la pared del comedor con distintas profundidades y alturas para dar cabida al televisor, el menaje, y ocultar alguna viga, o pilar, enchufes y cables, una tira de LED, un proyector... Imagina todo lo que se puede hacer en un mismo mueble.
El precio
Lo normal es que un mueble diseñado a medida sea más caro que un mueble estándar. Aún así, hay varias formas de rebajar su coste ajustando el proyecto al presupuesto disponible. Generalmente se abarata cuando se simplifica el diseño (interior y/o exterior) o se cambia el material. Como te imaginarás no cuesta lo mismo una librería de pladur, que otra de madera DM, abedul o roble macizo. Valora distintas posibilidades y presupuestos para conseguir el mueble perfecto al mejor precio.