Disfrutar de un dormitorio fresquito no tiene precio, sobre todo cuando el calor aprieta. Y aunque parezca imposible, hay maneras de tener un dormitorio veraniego y descansar en él. ¿Cómo? La respuesta es sencilla: tejidos agradables, estampados florales o paredes de ladrillo vista pueden ayudar a refrescar cualquier habitación y hacer que la temperatura de tu dormitorio sea muy agradable. No lo dudes y ¡pon a punto tu dormitorio ahora que llega el verano!
Techos de ladrillo
Los dormitorios con techos originales o de ladrillo son perfectos para crear sensación de frescor. Si este tipo de elemento se combina con paredes y textiles decorados predominantemente en blanco, la mezcla resultará perfecta para descansar en las noches veraniegas.
El minimalismo invita al descanso
Sin duda, cuando el calor aprieta es necesario intentar combatir el calor de la forma que sea. Los dormitorios deberían ser nuestro oasis de descanso y para ello, conviene no atiborrarlos de elementos ni de decoración. ¿No os da la sensación de que en verano, menos es más? A mí sí, quiero decir que en verano, cuanta más sensación de amplitud, menos cosas tenga por medio en el dormitorio, y más orden tenga, mi dormitorio cobra más sentido y aumenta la sensación de descanso. Así que para relajarse en la habitación, optemos por dormitorios minimalistas.
Tejidos con estampados tropicales
La decoración tropical también ayuda a trasladarnos a otro lugar, más veraniego, más fresco y por tanto, perfecto para descansar. Quita de la cama esos textiles de colores oscuros más propios del invierno, deshazte de mantas, edredones y guárdalos para cuando llegue el frío. ¡Ahora es el momento de renovar tus sábanas y textiles! Opta por colores blancos, estampados tropicales o marineros...¡y notarás cómo tu dormitorio es un oasis de paz!
Tonalidades beige y ocre
Hay colores que ayudan a crear ambientes más relajados y por tanto, ayudan a descansar más. El ocre, el beige y el blanco son una variedad cromática perfecta para recrear un espacio muy atractivo y relajado, y más si se combina con materiales como la rafia o la madera.
Una cama con dosel
Probablemente muchos han soñado alguna vez con dormir en una habitación como esta, con una cama con dosel. Un perfecto ejemplo de cómo se puede conectar un espacio interior con el exterior (jardín) y aprovechar las corrientes de aire que se puedan producir en el dormitorio.
Dormitorio con salida a la terraza
Aprovechar el jardín para conectar dos espacios y hacer del dormitorio no solo un lugar más atractivo, sino más fresquito no es difícil. Una manera de hacerlo es poniendo en conexión ambos ambientes, incluso a nivel estético, como si uno fuera continuación del otro.
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