5 preguntas que hacerte a la hora de reformar tu baño

Como deber, nadie obliga a nadie. Las bañeras acrílicas son un elemento muy interesante si contamos con pequeños en casa. Es cierto que los platos de ducha han ganado bastante terreno en esto. Colocar un plato hace que la estancia parezca mucho más amplia, de eso no hay duda. Además, si tenemos gente mayor en casa, los platos de ducha son bastante más seguros, con algunos extras como un agarrador, por ejemplo.

Aun así, siguen siendo muchos los que se decantan por una bañera. Los peques disfrutan más, pero también nosotros. Una bañera clásica, una bañera cuadrada, oval, rectangular o incluso una bañera retro... hará que tu baño se vea mucho más elegante. Eso sí, los modelos más grandes requieren espacio, por lo que si tu baño no es demasiado grande, quizá sea mejor decantarnos por la opción de los platos de ducha.

Si quieres ahorrarte el dinero, decídete por la cortina, evidentemente. No obstante, nadie puede negar que las mamparas de ducha son la opción más elegante y vistosa, además de la más segura para nosotros.

Sí, ya sabemos que hay muchas cortinas de ducha bonitas, con un montón de estampados y modelos para todos los gustos. No obstante, nadie puede negar que una mampara con vidrio templado, ya sea fija, abatible o corredera, hace los baños más vistosos.

Si hablamos de la seguridad, las cosas quizá estén hasta más claras. Una cortina de baño no impide que todo el agua quede dentro, siempre hay pequeñas filtraciones. Esto significa que a la hora de salir de la ducha, quizá tengamos más agua en el suelo de lo normal, algo que inevitablemente es más peligroso. Una mampara de ducha evitará que el agua caiga fuera. Además, encontramos un montón de modelos actuales que se ajustan a la perfección a cualquier estilo. Un buen ejemplo son las mamparas con perfilería negra, que encajan en todo tipo de ambientes, desde el más moderno hasta un baño con toques industriales.

En cuanto al acabado de los lavabos, podemos encontrar en el mercado una amplia variedad. Tenemos lavabos de madera, de cemento, de acero o incluso de piedras sintéticas. No obstante, debemos decir que uno de los materiales que mejor relación calidad precio tienen es la cerámica. Los lavabos de cerámica están hechos con material cerámico, que comúnmente suelen conocerse como loza. Son lavabos esmaltados normalmente en blanco, aunque se podrían esmaltar de otro color si las exigencias estilísticas del baño lo requirieran.

Además, teniendo en cuenta esto, los lavabos de cerámica pueden responder a diferentes estéticas, desde modelos modernos hasta los más tradicionales con pedestal. Lavabos independientes e incluso los lavabos sobre encimera, modernos y muy demandados en los baños actuales.

Salir de la ducha en invierno puede ser un verdadero problema si no contamos con un radiador. Muchos optan por los aparatos independientes, de esos que tiran aire caliente. No obstante, está comprobado que un radiador, a la larga, ahorra en energía.

Además, hay que comentar que podemos encontrar modelos adaptados a los baños que, además, serán más funcionales. Por ejemplo, los radiadores secatoallas. Son ideales para colocar en cualquier baño, pues además de ser una fuente de calor para no pasar frío tras el baño, nos ayudarán a secar correctamente nuestras toallas.

Al pensar en un sistema de hidromasaje, solemos pensar automáticamente en las bañeras. No obstante, también hay opciones si lo que queremos es colocar panel de ducha termostático con hidromasaje. Se trata de duchas realmente elegantes que, además de aportarnos un bienestar indiscutible, hacen que nuestro baño tenga aún más clase.

Hay opciones muy interesantes en el mercado, de esas que incorporan varios jets de hidromasaje, telefonillo y una gran alcachofa con función de lluvia o con cascada.