Es el día más primaveral, corres a la ventana, las abres de par en par, buscas el sol, cierras los ojos, respiras hondo y sonríes. ¡Qué placer! Terrazas, balcones o patios son ineludibles escenarios de reunión en todas y cada una de las ocasiones durante la primavera y el verano. Y es que estos espacios al aire libre tienen muchas posibilidades, tanto si vives en la ciudad como sino, de convertirse en la prolongación natural del salón.
Un oasis de frescor

Es blanca y fresca, y el viento la inunda de aroma de romero. Un rincón perfecto para escaparse y desconectar envueltos en silencio. El encanto de esta terraza recae en la buganvilla en flor que cubre parte de la estructura de la pérgola. Una delicada atmosfera provenzal recorre el exterior.
Abriendo las puertas al sol

Con salida desde el salon, una terraza, dos ambientes. ¿Quién dice que no es posible? Lo tiene todo. Un gran sofá para reunirse familia y amigos, con mil cojines para ganar confort, plantas y una zona para desayunos o cenas íntimas. ¿Lo que más nos gusta? Que el sofá es de mimbre. Calidez y decoración a la vez.
Desde la Provenza con amour

El clásico cañizo y el brezo aportan una semisombra refrescante que permite el paso de la luz natural. Cubrir la estructura con plantas trepadoras es una excelente elección para una terraza de aire rústico. Crear zonas de estar agradables, relajantes y bien decoradas. La clave está en distribuir muy bien los metros disponibles, apostar por una iluminación sugerente y por materiales resistentes y cómodos a un tiempo.
Mar y montaña, 2 en 1

Colores frescos y el mar de fondo. Una terraza en un dúplex para disfrutar de una buena comida en familia al aire libre, donde gracias al toldo podrás pasar largas horas de sobremesa. Una solución perfecta para ambientes de corte actual que busquen el máximo confort. Suelos de cerámica, mobilairio de mimbre y plantas, todo está decorado siguiendo esta paleta inspirada en la calma de la montaña.
La terraza del ático

El espacio cuenta, claro está. Sin embargo, eligiendo bien los complementos, puedes conseguir olvidarte de ese espacio y que tu mente desconecte y vuele hasta la terraza más paradisíaca. Este pequeño espacio está lleno de carácter. La buena organización, la acertada elección de materiales y las plantas, hacen de esta terraza un oasis urbano. ¡Toma nota!
Esencia ibicenca

Desde Ibiza este porche nos invita a pasar largos momentos de tranquilidad. Este porche está pensado para disfrutar del verano y de sus sobremesas eternas sin importar el tiempo. El toldo de tela frena la entrada del sol durante los tardes más calurosas y además resguarda de la lluvia. Deja pasar el aire y le dan un toque muy sofisticado. Todo, en una atmósfera bohemia-chic.
Pequeño y acogedor

¿Que en pocos metros no se puede tener una terraza estupenda? ¡Pues mira esta! Recogida y acogedora. Su truco para ser encantadora es mezclar piezas: madera, plantas y detalles vintage como los que sirven de jarrones para las floress.
Respetando la tradición

El patio ajardinado – ¡verdadero lujo!– Rodeado de frescor y abierto a la luz del sol. Un catálogo de experiencias vitales, cargado de estilo ecléctico y mucha personalidad. Para disfrutar de las pequeñas cosas de la vida. La decoración, tan cuidada como desenfadada, reúne tradicionales y actuales.
Una velada mágica

Una pérgola resistente recubierta por cañizo, muebles de mimbre y juega con la luz: guirnaldas de exterior escondidas y salpicadas por la estructura y alrededor de la mesa velas de todos los tamaños y colores. ¿Se puede pedir algo más para estar rodeado de los que mas quieres?
De espíritu libre

La combinación perfecta para un mirador convertido en terraza con un estilo desenfadado y de espíritu hippy. El color y los materiales son los responsables.En una terraza de estilo tan marcado como este no sirve cualquier detalle. Todos deben tener un aire que encaje. Un asiento de obra se integra a la perfección en espacios de aires mediterráneos como este.
hace 5 años
Muy bonito
hace 5 años
M'encanten tots!