Los porches pueden ser para todo el año según estén orientados o en qué zona climática estén pero, sobre todo, son para el verano. Noches largas y calor garantizado hasta que se pone el sol ..¿lo visualizas? Claro, no falta tanto para que llegue y es hora de pensar en acondicionar tu porche si eres uno de los suertudos que cuentan con uno. Os enseñamos 10 porches delanteros de 10 para que os sirvan de inspiración.
En este artículo
- Porche vegetal: frescor garantizado
- Porche con cañizo: sostenible y exótico
- Pérgola bioclimática: el porche sostenible
- Hierro fundido, madera y vegetal: un porche rústico y funcional
- Porche de lamas oriantables y cerramiento de vídrio
- Un porche que se abre y se cierra según la ocasión
- Un porche rotundo de hormigón
- Un porche que destaca por la altura
- Un porche semicerrado
- Un porche histórico: Casa Stahl (1960)
Porche vegetal: frescor garantizado
Lo mejor del sol es, paradójicamente, la sombra. Es un dicho popular pero en determinadas ocasiones es más que real. Si buscas descanso y disfrutar de tu porche en verano seguro que estás deseando tener zonas protegidas del sol. Una gran pérgola con entramado de madera con una cubierta vegetal permite habilitar el porche para disfrutar del frescor. Nos encanta la opción de acompañarla de grandes tiestos, pero también puedes apostar por plantas con flores y dar un toque de color.
Porche con cañizo: sostenible y exótico
Si tu porche no está demasiado expuesto a la lluvia y el viento pero sí orientado al sol, un toldo de cañizo es ideal. Con este tipo de cobertura conseguiremos cierta protección para el sol, ya que lo filtra pero dejando pasar una luz muy especial. La paja y la caña son materiales sostenibles que dan un estilo étnico y exótico a tu porche. Queda perfecto combinado con mobiliario sencillo. Si optas por piezas tapizadas procura que sean desenfundables y fáciles de lavar.
Pérgola bioclimática: el porche sostenible
La pérgolas bioclimáticas son una perfecta opción para tener un porche que ayude a la sostenibilidad. Las hay automáticas o manuales, retráctiles, de lamas giratorias o con canalización de agua a través de los postes. Las hay incluso que llevan instalados sensores de lluvia, viento y temperatura que se gestionan de forma remota. El sistema de funcionamiento de las pérgolas bioclimáticas es tan sencillo como eficiente: la parte superior se conforma con lamas orientables que se pueden mover según las necesidades para regular la temperatura. Las ventajas son, entre otras, el control de la luz durante todo el año, el uso de materiales con un mantenimiento fácil y duraderos y la protección de la lluvia y otras agresiones climatológicas.
Hierro fundido, madera y vegetal: un porche rústico y funcional
Este porche rústico con encanto fusiona una estructura de hierro fundido con lamas de madera y plantas trepadoras que ocultan parte de la estructura. La luz queda tamizada por las lamas de madera dando un aspecto de porche moderno y elegante al conjunto.
Porche de lamas oriantables y cerramiento de vídrio
En este porche se combinan las lamas orientables (que regulan el paso de reducción solar, por eso se les llamas pérgolas bioclimáticas) con un cierre de vidrio que puede hacer que el porche sea exterior o quede protegido y pueda usarse en invierno. Estas estructuras combinan la perfección con muebles y suelo de madera. Una cortina para terminar de regular la luminosidad y dar privacidad, si fuera necesario, completa el conjunto.
Un porche que se abre y se cierra según la ocasión
Este porche de aires rústicos destaca porque se abre y se cierra según la ocasión. El cerramiento son cortinas de cristal que pueden quedar cerradas o abrirse si queremos que el porche quede más o menos resguardado. Una parte de la estructura es fija, mientras que la otra está cubierta por una pérgola.
Un porche rotundo de hormigón
Este porche es rotundo y queda muy bien en ambientes contemporáneos pero que quieran mantener cierto carácter rústico. Se ha hecho de obra, con una acertada combinación de hormigón armado y piedra.
Un porche que destaca por la altura
Este porche es espectacular. Adosado a un lateral de la vivienda, destaca por su amplitud y, sobre todo, por su altura. Es un porche singular que combina madera y piedra para crear un espacio acogedor.
Un porche semicerrado
Este porche tiene "trampa": puede funcionar abierto o cerrado. De este modo, se puede regular la temperatura y se puede utilizar todo el año. La clave es esa forma de corredor que tiene, así como la combinación de hierro, madera, y vegetación
Un porche histórico: Casa Stahl (1960)
Acabamos con un porche histórico, el de la Casa Stahl o "Case Study House n.° 22" de Pierre Koenig en Los Ángeles. Porque es, ni más de menos, que de 1960. Un porche de casi seis décadas pero que, sin duda, cualquiera estaríamos encantado de tener hoy en día. El entorno exterior de la casa parece desmaterializarse: el agua de la piscina refleja los voladizos y el cielo, mientras que una estrecha franja pavimentada rodea la piscina.
¿Qué os han parecido estos porches? ¿Son o no son "de 10"?
hace 6 años
muy lindos¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
hace 6 años
Hay ideas excelentes, pero el de doble altura me ha dejado con la boca abierta pero por lo absurdo y disfuncional.