Que una habitación sea pequeña no significa que no pueda tener todo lo que necesitas. Lo esencial es una buena planificación de tus prioridades, deshacerse de lo que realmente no te haga falta y aprovecharse de algunos trucos para que el espacio parezca más grande. ¿Sigues sin creértelo? Aquí tienes 10 habitaciones que, a pesar de sus dimensiones reducidas, no pueden ser más completas.
En este artículo
- Todo al blanco
- Planifica al milímetro
- Equilibrar centímetros
- Almacenamiento como ornamento
- A la vertical
- A la horizontal
- Más en menos
- Todo en una pared
- Todo puede aprovecharse
- Luz y color
Todo al blanco

Toda una habitación en blanco dará continuidad y hará que la luz se extienda por toda la estancia, por muy pequeña que sea la fuente de luz natural. Lo básico para agrandar el espacio es minimizar las líneas, es decir, evitar divisiones o detalles que interrumpan la continuidad del espacio.
El blanco es el color clave para conseguir luminosidad y amplitud, pero también puede resultar algo frío e impersonal. Para equilibrarlo, combínalo con el material cálido por excelencia: la madera. Apuesta mezclar tonos claros con otros más oscuros. Tu personalidad puede verse reflejada en pequeños detalles de color en los cojines, plantas y accesorios útiles como lámparas de pared o jarrones.
Planifica al milímetro

Es la única manera de hacer las cosas bien cuando se quiere tener mucho en muy poco espacio. Lejos de conseguir un desenlace saturado, la remodelación de este balcón desprende intimidad y sofisticación.
Normalmente los balcones no cuentan con mucha profundidad; para evitar un resultado recargado, la zona frontal debe quedar lo más despejada posible; es decir, ubicar las zonas funcionales en los extremos, tanto si es un balcón alargado o si tiende a una forma cuadrada. Si quieres que el mobiliario sea fijo, puedes utilizar el cajón bajo la zona de descanso como almacenamiento auxiliar; en caso contrario, opta por mobiliario plegable.
Equilibrar centímetros

Además de las dimensiones, a veces sus proporciones no ayudan a encontrar la mejor distribución. La planificación previa es vital para que no te falte de nada, pero también nos ayuda a equilibrar proporciones aparentemente indomables.
El punto de partida de esta cocina está en el gran ventanal y en el blanco, presente en la mayoría del mobiliario, ya que potencia la entrada de luz natural. Los objetivos eran reducir la sensación de "túnel" y crear una cocina funcional. Para conseguirlo, se concentraron la mayoría de elementos en la pared del fondo, haciendo que ésta se acerque, y se utilizó el contraste entre el negro y el blanco para crear el efecto visual de que estas se separan.
Para complementar el espacio de trabajo, se instaló una mesa basculante que puede plegarse cuando no se está utilizando, dejando libre la circulación por toda la habitación.
Almacenamiento como ornamento

Ya hemos dicho que lo básico para no saturar una estancia pequeña es apostar por colores claros, pero puede que, cuando veas el resultado, te resulte algo soso y monótono. La solución está en dar ese toque especial en elementos funcionales con mucha personalidad.
La organización del almacenamiento en los baños pequeños es algo imprescindible y, ya que es una obligación, ¿por qué no hacer de ello un elemento más de decoración? Instala unas baldas abiertas en madera natural y llénalas de color con tus toallas, jabones, con flores o cestas de mimbre.
A la vertical

Los techos altos son un lujo y no solo porque sean bonitos estéticamente, sino porque pueden multiplicar las posibilidades de un espacio. Crea un espacio auxiliar con una superficie suspendida. Las posibilidades de aprovechar ambos espacios son muchos, depende de la estancia donde quieras instalarla. Son una buena opción para un dormitorio infantil o juvenil: instalando una cama suspendida quedaría todo el espacio inferior para dar rienda suelta a los juegos o estudiar.
A pesar de estar ganando centímetros, siempre hay que tener presente que lo más importante es no sumar peso visual al conjunto, evita estructuras en tonos oscuros.
A la horizontal

Haz de tu terraza o balcón el rincón más relajante de tu casa y ¡prescindiendo de los muebles! Los muebles pueden comerse el espacio útil y, en el caso de los exteriores, no son necesarios. Para máxima comodidad solo necesitas muchos cojines y almohadas. Para crear una atmósfera tranquila y amplia, instala un jardín vertical frondoso y compleméntalo con un espejo.
Más en menos

Si tienes un estilo ecléctico y te gusta mezclar materiales y diseños, debes saber que las habitaciones pequeñas también tienen un hueco para ti. Para poder combinar diferentes texturas, lo más fácil es partir de una envolvente en blanco que camufle elementos imprescindibles como radiadores o los sanitarios. Otro elemento indispensable en un baño son los espejos, que te ayudarán a aumentar la profundidad. Si cuentas con unas proporciones alargadas y estrechas, colócalo en perpendicular al lado más corto.
Todo en una pared

La distribución lineal es ideal para viviendas estrechas. Para aplicarla, es esencial aprovechar los lados más alargados. Con el objetivo de dar espacio a cada función sin renunciar a la sensación de amplitud, esta cocina se concentró en una sola pared.
Tras una planificación para instalar lo estrictamente necesario, se opta por el blanco como color principal. El blanco se utiliza para los elementos que más saturan visualmente y, la mayoría, quedan ocultos tras las puertas de los armarios. A pesar del poco espacio con el que cuenta esta cocina, no se renuncia al color en las encimeras y el frente que aporta dinamismo y personalidad.
Todo puede aprovecharse

En casos en los que los centímetros están contados, el dormitorio suele ser un espacio difícil de ajustar. La cama es un elemento generalmente muy voluminoso; lo mejor es ubicarla al fondo para mantener libre la circulación en el resto de la habitación.
La cama puede también ser el truco bajo la manga; si la elevas, podrás utilizar el espacio bajo ella para almacenaje. La pared del cabecero, que suele quedar inutilizada, también puede ayudarnos a sumar en almacenaje con unos armarios compactos que oculten todo lo que guarden para dar un resultado sencillo y ligero.
Luz y color

Una habitación luminosa, aunque sus dimensiones sean pequeñas, tiene muchas más posibilidades que una oscura. Si tienes un baño bien iluminado, atrévete con el color y renuncia al típico total look en blanco. Los revestimientos con acabados satinados harán que la luz se extienda por todo el espacio, lo que te permitirá añadir un toque de color en las juntas.
Para el suelo, los acabados lisos como los de la resina o el microcemento aportan profundidad y amplitud. Como hemos dicho, la luz te permitirá jugar con colores más arriesgados como el negro, pero puede aplicarse a baños con menos luz eligiendo tonos claros.
hace 7 años
Me encantan los baños que son tan monos, llenos de luz y color, las juntas en color rosado también me parecen lo más
hace 6 años
Dónde puedo encontrar este revestimiento de pared? De qué se trata? Gracias