Se trata de solucionar adecuadamente el tema de la vivienda unifamiliar en una parcela de unos 450 m2 con importantes condicionantes urbanísticos.
Las dimensiones de la parcela reducen las alternativas del proyecto, por lo que se adopta un concepto inicial de forma compacta y regular, apoyado en esquemas extraídos de la tipología clásica de patio central, de amplia aplicación en la arquitectura palaciega aragonesa.
La riqueza en elementos del modelo original escogido se reduce a aquellos esenciales, y el espacio vacío central debe de ser ocupado por la escalera que se convierte en el elemento clave, generador del diseño.
La decisión inicial de contener el edificio en un volumen cúbico de 10x10x10 m es superada por una explosión centrífuga, necesaria para alojar los elementos servidores de la vivienda, sin aumentar con ello la escala del edificio.
Sin embargo, la solidez del esquema cúbico queda intacta y, como consecuencia del experimento, el volumen alcanza un segundo grado de complejidad, con trazas regulares geométricas mas ajustadas a los límites de ocupación de la parcela.
Como resultado del proceso se obtiene un nuevo modelo, variante del original, más dinámico e idóneo para resolver el problema inicial.
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