Amplitud y luminosidad en un piso de 90 m2 en Valladolid
Una pareja que decide reformar un piso familiar, adaptándolo a sus necesidades y convirtiendo un piso de los años 80, de un buen tamaño y mucha luz, pero con una distribución anticuada y poco acorde a sus necesidades.
Querían la cocina independiente, por lo que se optó por eliminar los tabiques entre el pasillo, estudio y salón para crear un espacio único con un gran salón y comedor para recibir visitas, dejando el hall independizado con una gran puerta vidriera. La joya del salón es una enorme librería para alojar todos los libros que la pareja posee.
Los colores de la reforma son el blanco y la madera oscura, a combinar con unas librerías y alacenas que se ha intentado conservar.
Fecha realización: 2020
En este artículo
Las estanterías a medida en blanco y madera de nogal son la joya de la vivienda.
Una hornacina en silestone permite la guardar los útiles del baño
La cocina, en forma de C, está muy bien aprovechada, con armarios en esquina, persianas, campana in box, almacenaje extraible, etc.
Una encimera imitación pizarra y muebles blancos con gola en negro, combinan a la perfección con el solado negro y los azulejos rectificados blancos
Un aseo muy bien aprovechado. La antigua ducha se utilizó para ubicar un armario de limpieza.