Pequeño bosque de 16 pinos demasiado cerca de la vivienda y con algun ejemplar ya muerto. El cliente tomó la decisión, recomendados por el ingeniero agrícola de la empresa, de cortar los pinos, puesto que ya se había caído uno y había peligro por la proximidad con la casa.
El temor de posibles accidentes por el mal estado sanitario de los ejemplares no compensava la sombra y frescor que proyectaba en verano.
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