En este artículo
- Revisa grietas y agujeros
- Las zonas más húmedas de casa
- Techos, esquinas y armarios
- Las temidas cucarachas
Revisa grietas y agujeros
Las hormigas entran a nuestra casa por un motivo, buscar comida. En cuanto a las zonas de acceso, su tamaño permite que puedan entrar por muchos sitios diferentes. Acceden por tuberías de la fachada, cables que entran dentro de nuestro hogar e incluso pueden instalarse una vez entremos nuevas plantas a casa.
El periodo de actividad de las hormigas comienza en marzo y termina en noviembre, momento en el que se meten todas en su hormiguero. Estos meses de primavera y verano son cruciales para su propagación. Además, si en un exterior puede ser fácil reconocer el lugar en el que hay una plaga de hormigas, en una vivienda puede hacerse un poco más complicado. El motivo es que en el exterior tan sólo tenemos que buscar en las zonas ajardinadas para detectar sus hormigueros, pequeños montículos de arena con agujero. En el interior, la cosa cambia. Estos insectos cavan túneles en pequeños huecos o grietas de nuestras paredes o suelos. Son tan pequeñas, que, como comentábamos, pueden colarse en los recovecos más pequeños.
Muchas veces nos daremos cuenta únicamente porque las veremos en hilera. En este caso tendremos que seguirlas para poder ver dónde se alojan. Si detectamos uno, lo más rápido es sellar la zona para evitar que lleguen más.
La mejor prevención para que las hormigas no aparezcan es tener una higiene correcta en el hogar. Barrer y limpiar siempre después de comer y cocinar e intentar bajar constantemente la basura. Además, también puede ser efectivo realizar diversas reformas que puedan arreglar grietas en paredes.
Las zonas más húmedas de casa
Los mosquitos son uno de los problemas más recurrentes de cara al buen clima. Para ubicarlos en casa, tenemos que saber que las hembras sólo dejan sus huevos en el agua. Por tanto, zonas húmedas como el baño o la cocina podrían ser su espacio. También macetas con agua encharcada o incluso pequeños cacharros que se quedan en el balcón y que se llenan de agua durante las lluvias. Tened cuidado con todo eso.
Los mosquitos también sienten predilección por la basura acumulada y los restos de comida. En verano está claro que dejar comida en la cocina no es buena idea. En cuanto a la prevención, si bien es cierto que hay desde enchufes hasta plantas naturales capaces de repelerlos, como la albahaca o la caléndula, la mejor forma de tener una vivienda sin mosquitos es instalar mosquiteras. De esta forma podrás tener una casa aireada sin miedo alguno.
Techos, esquinas y armarios
Lo primero que tenemos que decir es que, normalmente, las arañas prefieren los exteriores. Las arañas que encontramos dentro de casa rara vez son peligrosas. Además, la alimentación de estas arañas puede ser útil para terminar con otras plagas. No obstante, entendemos que tener arañas no es grato, así pues, intentemos entender un poco qué lugares son sus favoritos.
Esquinas en el techo y esquinas en general en las que puedan tejer sus telas. También armarios y zonas oscuras. Cualquier rincón oscuro y sin ventilación, en el que no hay mucha intervención humana, puede ser un buen rincón para ellas.
Para evitarlas, lo mejor que podemos hacer es limpiar a fondo mínimo una vez por semana, pero a fondo de verdad, haciendo hincapié en techos y paredes, así como en rincones difíciles en los que suele acumularse mucho polvo.
Las temidas cucarachas
El verano y las cucarachas también están muy asociados. Muchas ciudades cuentan con auténticas plagas durante estos meses, plagas que se pueden ver por las calles pero que, en muchas ocasiones, también llegan a casa.
Hay que tener en cuenta que las cucarachas tienen un potencial reproductivo enorme y que, además, se adaptan a cualquier medio por muy hostil que sea. Son expertas, también, en acceder a los rincones más complicados, como grietas y huecos que son casi imperceptibles, para sobrevivir y reproducirse.
Detectarlas es fácil, las veremos corretear por armarios de la cocina o por el suelo. Además, también se pueden detectar con restos de piel, pues hacen muda frecuentemente.
En el caso de las cucarachas, y siempre que pensemos que puede haber una plaga, es importante contactar con especialistas en plagas, pues esta especie está en contacto con la basura, el alcantarillado y todo tipo de residuos.