A la hora de comenzar un proyecto de remodelación es de suma importancia ver el estado general de la obra, realizar un listado de necesidades y gustos del cliente, y por último, lograr captar la idea que el cliente tiene en su cabeza y no siempre logra expresar en palabras.
En nuestra primera visita a la obra, nos encontramos con un espacio oscuro y con diferentes situaciones ya planteadas e inamovibles, y muchas otras que fueron adaptadas para lograr el mayor funcionamiento de cada espacio, dando armonía en el diseño.
Acentuar las proporciones mediante el diseño fue primordial a la hora de pensar el proyecto. Resaltar al máximo el largo del espacio ayudó a que esa idea de departamento cerrado y oscuro cambiase por completo.
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