El proyecto se realiza a instancias de Carla y Klaus Torstolf y consiste en la recuperación y rehabilitación de un molino situado en un entorno natural privilegiado cambiando el uso de molino a vivienda y despacho profesional.
El programa de necesidades consistía en el normal de una vivienda unifamiliar e incluía un espacio para el despacho profesional. Se estudio la posibilidad de utilizar la fuerza del agua pero se descartó por la inversión económica que suponía que no siendo muy elevada representaba un coste importante para una familia convencional. Se han tratado las aguas previas a su vertido al río.
Se estudiaron huecos en fachada y cubierta para obtener la máxima ganancia solar y las menos pérdidas nocturnas. La circulación es sencilla, generando un gran espacio central que hace las funciones de salón-distribuidor principal con ventanas de tejado e iluminación prioritaria cenital. Los espacios resultantes son espacios amplios y luminosos con entrada de sol directa en su mayor parte, ventilación cruzada, sistemas constructivos tradicionales, materiales seleccionados por sus cualidades bióticas, incorporando aislamiento natural, morteros tradicionales así como revestimientos ricos en texturas que transpiran al igual que sus moradores. Estructura de fábrica y madera combinada con tabiques divisorios de obra y ligeros de fibra-yeso con montante de madera que generan agradables habitaciones rectangulares bajo la estructura tradicional de madera tratada con aceites y pigmentación natural. Biohaus-Gutex y su constructor Jose Luis Aranda encontraron la aplicación a través de las distintas soluciones para el programa de necesidades con materiales naturales, libres de toxicidad y que durante la ejecución de las obras y durante su uso contribuyen a ensalzar los sentidos en esta construcción rica de per sé.
En este artículo
Espacio central con lucernarios, salon
salon con chimenea
cocina
terraza al canal
Entrada trasera por la cocina y el canal
Entrada principal por el canal