El proyecto aborda la reconversión de un antiguo cine en edificio para oficinas de notaría. Se mantuvieron y rehabilitaron las fachadas a la calle, realizándose un vaciado del interior del edificio, reedificándolo de nuevo. El proyecto se organiza en cinco plantas unidas por un gran patio interior, que permite un excelente aprovechamiento de la luz natural en un contexto urbano histórico con una trama densa con escasez importante de la luz natural.. La conexión visual que se produce desde cualquier punto del edificio, tanto en planta como en sección potencia la fluidez y claridad del espacio articulándose desde lo público a lo privado. Adicionalmente se realizó un estudio del interiorismo que incorporó mobiliario e iluminación contemporánea y de autor, consolidando la imagen final del edificio.
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