Tres años después de realizar el diseño del Bar-Restaurante Casa Comín se nos pidió renovar la imagen del comedor, ya que por el uso se había estropeado la pintura y el zócalo...
Decidimos darle un cambio radical y darle una paleta de colores piedra y capuchino que ampliaran visualmente el espacio.
Para conseguir una sensación más cálida instalamos un techo de lamas de madera y un vinilo mural personalizado con el logo del local.
Así mismo optamos por abrir la falsa ventana e instalar un vinilo retroiluminado con la imagen de un botellero. Esta imagen tiene de fondo el color azul que antes tenía el comedor y que hace un guiño de continuidad con el bar, dónde predomina este color.
Se ha conseguido dar un cambio radical al comedor con un aspecto elegante y cálido.
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